El Banco Mundial ha alertado de que la pandemia de coronavirus tendrá graves efectos en los países asiáticos y podría llevar a 11 millones de personas a caer en el umbral de la pobreza, un pronóstico que contrasta con la proyección del banco antes del brote que estimaba que casi 35 millones de personas saldrían de la pobreza en la región en 2020, más de 25 millones solo en China.
El crecimiento regional estimado en 2019 fue de 5.8% y en 2020 podría reducirse a 2,1% o contraerse en 0,5% en el peor de los casos. En China, epicentro del brote de coronavirus, el crecimiento pasaría de 6,1% en 2019 a 2,3% y en el peor de los casos casi desaparecería por completo.
Cualquier interrupción de la economía de China, la segunda más grande del mundo y un motor primario del crecimiento global, tendría consecuencias en le economía de todo el mundo.
En el informe publicado por el Banco Mundial se advierte que toda la región de Asia Pacífico debe prepararse para «un impacto serio» en la pobreza y el bienestar, a través de enfermedades, muertes y pérdida de ingresos. “El dolor económico significativo parece inevitable en todos los países”, indicó el informe.
“Todos los países de la región de Asia Oriental y el Pacífico y más allá deben reconocer que, además de las fuertes acciones nacionales, una cooperación internacional más profunda es la vacuna más efectiva contra esta amenaza virulenta”, señaló el informe.

El Banco Mundial se ha comprometido a proporcionar 14.000 millones de dólares en apoyo financiero a los países en desarrollo y hasta 160.000 millones de dólares para proteger a los pobres y vulnerables.
El crecimiento económico en la región disminuirá significativamente en todos los escenarios. Indonesia, Papua Nueva Guinea y Filipinas serán los más afectados, mientras que Vietnam, Camboya, Laos, Mongolia y Myanmar esperan un crecimiento a niveles más bajos que el año pasado.
Los cierres de fronteras internacionales y la interrupción de servicios de transporte aéreo o marítimo, medidas tomadas para evitar la propagación del covid-19, afectarán a países como Malasia o Tailandia cuyos ingresos por turismo representan más del 10% del PIB.
La recuperación de estos lugares depende de la rapidez con la que se contenga la pandemia, por eso las pruebas, seguimiento y cuarentena son factores clave en este momento.
Los subsidios para pagos por enfermedad, inyecciones de liquidez para ayudar a las pequeñas y medianas empresas y alimentación escolar u otro tipo de apoyo para los estudiantes afectados son otras medidas que deberán implementar los gobiernos para evitar el aumento de la pobreza.
Compartir el suministro de productos médicos clave o incluso eliminar los aranceles sobre estos productos médicos es un gran apoyo que se debe dar entre países para luchar también contra esta amenaza.
“Todos los países de la región de Asia Oriental y el Pacífico y más allá deben reconocer que, además de acciones nacionales audaces, una cooperación internacional más profunda es la vacuna más efectiva contra esta amenaza virulenta”, destacó el informe.
Fuentes: CNN