Este miércoles, Injuve ha presentado el Informe Juventud en España 2020 en el que se afirma que los juegos de azar se han vuelto una fórmula cada vez más extendida de entretenimiento entre la población joven.
Según el informe, que recoge los resultados sobre la influencia de las casas de apuestas y juegos de azar en los jóvenes entre 15 y 29 años, la edad media de los jóvenes adictos en España es de 23 años, aunque «casi un 15% de los afectados son adictos desde los 18 años».
El documento señala que de entre esas personas entre 15 y 29 años, el 16,2% juega habitualmente, un 12% sólo a través de Internet. Es decir, entre noviembre de 2019 y en junio de 2020, que fue cuando se realizaron las entrevistas, entre uno y dos jóvenes de cada diez tiene exposición cotidiana al juego de azar, tal y como recoge infoLibre.
Pero tal y como explica Pablo Simón, politólogo y uno de los autores del informe: «Habríamos capturado el periodo de confinamiento, cuando las casas de apuestas estuvieron cerradas y, suponemos, habría aumentado el juego online». Querían ver, dice, la influencia de las casas de apuestas y juegos de azar en un «estadio de normalidad».

El primer año de pandemia ha provocado un frenazo del crecimiento del juego de azar y las apuestas online, aunque el dinero movido fue mayor. Durante el segundo y el tercer trimestre de 2020, el importe total de las cantidades dedicadas a la participación en el juego, deducidos los premios satisfechos a los participantes, es de 406 millones de euros, un 9,73% más que en el mismo periodo de 2019.
Lo más preocupante es la disminución progresiva de la edad de los jugadores, que cada vez son más jóvenes. Carlos Villoria, director de la Asociación de Psicoterapeutas para el Estudio de las Adicciones Psicológicas (Apeap) y doctor en Psicología por la UCM ha afirmado que «en el ámbito clínico se observa que la edad media de los jugadores se ha reducido casi 20 años. Antes detectábamos el problema del juego, o bien por estudios o bien en la clínica, en personas de unos 45 años. Sin embargo, en los últimos cinco o seis, esa edad se ha rebajado en unos 20 puntos», dice. ¿Por qué? Por «el boom de las casas de apuestas y de las apuestas deportivas».
El director técnico de la Federación Española de Jugadores de Azar Rehabilitados (Fejar), Juan Lamas, ha advertido de lo mismo que Villoria: «Antes recibíamos casos de varones de 50 años que jugaban en bares, ahora de jóvenes de 30 que, a través de una tablet o un móvil, juegan desde su habitación».
«La edad de iniciación al juego ha ido descendiendo paulatinamente desde el año 2012 y actualmente se sitúa en 14,5 años. A esa edad empiezan a jugar», lamenta Llamas. Tanto Villoria como Llamas consideran que internet ayuda porque la edad para jugar físicamente está establecida en los 18 años.
Los hombre son los más afectados por el juego, el 26% de los encuestados afirmó hacerlo frente al 6,8% de las mujeres. También es un factor determinante el nivel educativo: según el Informe Juventud 2020, a menor nivel, mayor propensión a jugar.
Por tanto, a juicio de Villoria, la economía sólo influye a la hora de acceder por primera vez a las apuestas y esto se explica porque este tipo de locales predominan en los barrios en los que la renta media de los hogares está por debajo de la media municipal.
Pablo Simón ha explicado que las apuestas, en general, tienen un «fuerte componente de clase». «Los hogares más modestos, menos educados, suelen consumir más apuestas en genérico. En online aparece completamente la clase social».
Además, Villoria señala que el factor socioeconómico influye también a la hora de pedir ayuda cuando la adicción al juego ya es una enfermedad, ya que en la cartera de servicios de la Seguridad Social no está incluida la terapia para el trastorno de juego patológico, que se trata en el ámbito privado y es bastante cara». Salir de esta adicción por uno mismo es muy difícil y es necesaria la ayuda externa.
Publicidad de casas de apuestas
El Ministerio de Consumo quiso poner coto a este problema. Empezó por prohibir la publicidad de casas de apuestas. El día 3 de noviembre de 2020, el Consejo de Ministros aprobó el Real Decreto de comunicaciones comerciales de las actividades del juego. El Ejecutivo prohibió la publicidad audiovisual fuera del horario de 1.00 a 5.00 horas de la madrugada, ajustó el contenido de los mensajes para proteger a lo que denominaron sectores vulnerables e impidió a los operadores del mercado la emisión de bonos de jugadores. Además, se acordó que los clubes deportivos no podrán llevar publicidad en su equipación y los eventos deportivos tampoco tendrán permitido emitir anuncios fuera de la franja horaria permitida.
Sin embargo, los efectos del Real Decreto todavía no son patentes. Según explica Consumo a preguntas de infoLibre, aunque el Real Decreto esté aprobado, este cuenta con un «periodo de cadencia» para los contratos firmados, por lo que «sus resultados empezarán a verse cuando el próximo 30 de agosto de extingan todos los contratos publicitarios y la publicidad del juego pase a estar prohibida fuera del horario de 1.00 a 5.00 horas de la madrugada».
El ministro de Consumo, Alberto Garzón, avanzó el pasado mes de diciembre que su Ministerio elaborará una nueva norma para acotar el juego problemático, sobre todo en los jóvenes. Lo hará, según explicó el organismo en una nota de prensa, abordando «todas aquellas medidas de actuación, intervención, control, prevención, sensibilización y reparación que configuren una oferta de la actividad de juego que sea informado, responsable y más seguro».
«Esta visión integral que permitirá rematar con éxito el proceso, requerirá de la colaboración de todos los agentes», añadió el ministro, que también apuesta porque los municipios pongan coto a la proliferación de las casas de apuestas, algo que ya hizo el Ayuntamiento de Ada Colau en Barcelona.
Pero esto es más complicado porque las competencias sobre las casas de apuestas físicas no recaen sobre el Gobierno, sino sobre las autonomías y ayuntamientos.