Francia volverá a estar confinarse a partir de este viernes y hasta el próximo 1 de diciembre, como mínimo. Por su parte, Alemania decreta el cierre toda la gastronomía y el ocio a partir del lunes en toda Alemania, así como gimnasios, y durante todo el mes de noviembre en el marco del nuevo paquete de medidas para frenar la segunda ola.
Sin embargo, «Spain is diferent» y dos ex presidentes, José María Aznar (PP) y Felipe González (PSOE), cargan contra el Gobierno por tomar medidas para detener el avance del coronavirus en un foro económico organizado por el diario Expansión.
González y la «crisis de cogobernanza»
González señaló que el decreto del estado de alarma aprobado por el Ejecutivo de Sánchez «no es delegable» a las comunidades y alertó sobre una «crisis de cogobernanza» en un «estado descentralizado» como España.
«Analizo el decreto de alarma y se delega la facultad de ejecutar lo decidido, con una amplitud de interpretaciones, a los presidentes autonómicos. No es delegable, por decreto, la competencia del estado de alarma», ha sentenciado el exlíder socialista.
González ha avisado sobre una «crisis de gobernanza» en el «estado descentralizado» que se ha acentuado durante la pandemia pues, a su juicio, durante la desescalada de la primera ola las «competencias se dispersaron» en las autonomías y empezó «una carrera» para «ver quién llegaba antes a un desconfinamiento».
Aznar y la libertad
Por su parte, José María Aznar recalcó que la libertad «sigue siendo el gran valor de las sociedades libres». «No nos olvidemos nunca de eso. Ni tampoco cuando se promulgan estados de alarma de seis meses y toques de queda legalmente porque alguien lo dice, que pasaba por allí. El derecho también es importante», enfatizó, para subrayar que están hablando de las libertades y los derechos individuales de las personas.
Aseguró que España tiene un «futuro complicado» tras la crisis del coronavirus, pero hay espacio para forjar una alianza de «moderados y modernizadores» y llegar a acuerdos de país. A su entender, el futuro de España depende de que se logren esos pactos «para varias décadas».
«Creo que hay un espacio para construir. También en España, radicalismos aparte, hay un espacio para forjar una alianza de moderados y de modernizadores bajo el paraguas de la Constitución y de la Unión Europea», ha manifestado, para añadir que esa alianza tiene que «comprometerse claramente con los objetivos del país y no debe ser para una legislatura.