La número uno del PSC por Barcelona en las elecciones del 28A, Meritxell Batet, ha alertado de que la tendencia positiva que reflejan las encuestas puede desmovilizar a votantes socialistas, por lo que ha pedido obviarlas y no relajarse: “Después del recuento será demasiado tarde y nos arrepentiremos”, ha avisado.
La candidata socialista se ha desplazado este domingo a primera hora hasta Girona, donde ha protagonizado un acto junto a los candidatos por esta circunscripción Marc Lamuà y Ferran Camas.
A orillas del río Onyar, la ministra ha llamado a la movilización después de que este domingo La Vanguardia haya publicado un sondeo en el que vaticina una amplia victoria socialista en el conjunto del Estado y también les augura la primera plaza en Cataluña, donde el PSC no ganaba desde 2008, cuando Carme Chacón obtuvo 25 diputados y más de 1,6 millones de votos.
“Con el alto número de indecisos que hay, el peligro de que las tres derechas sumen -en alusión a PP, Cs y Vox- es real. El peligro de la involución existe. Que nadie se confíe, en estos momentos las urnas están vacías y después del recuento será demasiado tarde y nos arrepentiremos”, ha sostenido.
Y es que, según ha relatado, en los últimos días ha vivido situaciones que le han permitido constatar que las encuestas positivas son un arma de doble filo: “Me encuentro con mucha gente que me dice: ‘quizá no hace falta que vayamos a votar porque esto ya está hecho’ o ‘quizá da igual que votemos a otras opciones porque no sumarán'”, ha explicado.
Ante este escenario, Batet ha rehuido el triunfalismo y ha reclamado ir a votar para lograr avances sociales en ámbitos como el ecologismo, el feminismo, la salud y la educación.
Unos elementos que ha ilustrado mediante un poema de “Poetas andaluces de ahora”, escrito expresamente para las elecciones generales del 28 de abril, y que le hicieron llegar este sábado.
En él, los autores defienden las “mujeres sin bozal”, los “trenes que vuelven” y la necesidad de “gritar a las urnas cada vez que llamen a las armas”, ya que “la vida sin libertad no es vida” y las personas deben tener “derecho a ser y a morir incluso”.
Aprovechando su visita a Girona, ciudad de la que fue alcalde el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont, la ministra ha lanzado un mensaje a todos los socialistas de las comarcas gerundenses: “Aquí, en un lugar difícil, os quiero dar las gracias porque os habéis quedado y habéis dado la cara para defender la convivencia entre todos los ciudadanos”.