Los políticos en plena campaña electoral, en su afán por convencer al electorado, a veces dejan al descubierto sus fallas. Atacan desmedidamente a sus oponentes, expresan ideas descabelladas, hacen declaraciones ridículas y, en ocasiones, intentan ser simpáticos pero terminan pareciendo comediantes en lugar de líderes políticos.

Uno de los casos más llamativos ocurrió recientemente durante un discurso del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page. En su intento de elogiar al presidente de las Cortes de Castilla-La Mancha, Pablo Bellido, se excedió tanto en sus palabras que terminó hablando de sus propios hijos de una manera bastante extraña.

El bochornoso discurso de Page: "Le digo a mi hija: 'Tú estudias el cuerpo humano en medicina, pero las prácticas las hace tu hermano'".
El bochornoso discurso de Page: «Le digo a mi hija: ‘Tú estudias el cuerpo humano en medicina, pero las prácticas las hace tu hermano'».

«Le digo a mi hija: ‘Tú estudias el cuerpo humano en medicina, pero las prácticas las hace tu hermano'», señaló. Y añadió: «A veces he pensado […] a ver cuándo se echa… Ya ha tenido novios, pero bueno. Decidió estudiar antes que… Empezó antes por las clases teóricas. Yo se lo digo siempre, tu estudias el cuerpo humano en medicina, pero las prácticas las hace tu hermano».

Las reacciones al ver el vídeo fueron unánimes, y se desató un gran revuelo en las redes sociales. Muchos expresaron su sorpresa y desconcierto ante las palabras del presidente:

La anécdota protagonizada por García-Page pone de manifiesto cómo los políticos, en su afán por ganar el favor del público, a veces pierden el tino y se exceden en sus discursos.

Estos incidentes nos invitan a reflexionar sobre la importancia de la responsabilidad y el respeto en el ejercicio de la política, recordándonos que el comportamiento de nuestros representantes públicos puede tener un impacto significativo en la imagen que proyectamos como sociedad.

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