Las bodas suelen ser eventos memorables, tanto para los invitados como para los novios que se dan el “sí, quiero”. Es un día especial que se celebra con alegría y del que se guardan en la memoria diferentes momentos vividos durante la ceremonia.

Sin embargo, a veces, las bodas se vuelven inolvidables debido a situaciones inusuales. Este fue el caso de una usuaria de Twitter, quien compartió con sus seguidores la solicitud que una novia hizo el día de su boda.

La usuaria comenzó contando que la anécdota involucra a una conocida suya, quien aparentemente tiene el “paladar de un niño de cinco años”. Con esta expresión, se refiere a personas que tienen gustos alimenticios similares a los de los niños y prefieren consumir alimentos más apetecibles para ellos en lugar de opciones más adultas.

Una boda fuera de lo común: la novia que pidió un menú poco convencional
Una boda fuera de lo común: la novia que pidió un menú poco convencional

“Hablando de gente con “paladar de niño de 5 años”, conozco una chica que el día de su boda pidió el típico menú de boda para los invitados, y para ella pidió pizza margarita y pollo empanado… Y me parece de lujo porque era su puta boda y estaba allí para disfrutarla, o no?”, relató la usuaria. Esta acción, que rara vez se ve en las bodas, sorprendió a más de un internauta.

En otro tuit, la joven señaló: “La entiendo perfectamente estando yo en el polo contrario, de persona que suele pedir lo más raro y exótico porque comer algo nuevo y que le guste le da serotonina pa una semana”

https://twitter.com/OjitoIzquierdo/status/1668904950380806145?ref_src=twsrc%5Etfw

https://twitter.com/OjitoIzquierdo/status/1668919712917356555

El tuit ha generado numerosas reacciones en la red social y ha acumulado casi 225.000 visitas. Algunos comentarios de los usuarios elogian la originalidad de la novia en su banquete de bodas, mientras que otros, en tono humorístico, cuestionan sus preferencias alimenticias.

https://twitter.com/OscarVV/status/1668905937250156544

 

La historia de esta novia ha generado un debate divertido en torno a los gustos culinarios y la libertad de elección en un día tan importante como una boda. Al final, lo que importa es que la novia disfrutó de su día como deseaba, sin importar las expectativas tradicionales.

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