La vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, ha calificado de «bastante disparatada» la declaración sobre el aborto del número dos de la lista del PP por Madrid, Adolfo Suárez Illana, y ha asegurado que «no va a haber punto de retorno» en el derecho de las mujeres a controlar su maternidad.
«En este asunto se entra como un elefante en cacharrería, pero no es un caso único, vemos constantemente a la derecha utilizar este asunto que afecta a derechos alcanzados por las mujeres, en esta democracia española y en cualquier país de nuestro entorno europeo», ha sostenido Calvo este jueves en declaraciones a los periodistas tras la presentación del congreso «WomenNow Summit».
En una entrevista radiofónica, Suárez Illana ha pedido «ayudar a las mujeres que tienen que decidir entre ser madres de un niño vivo o un niño muerto» y ha calificado como una «salvajada» que no se haga nada para reducir el número de abortos: «Los neandertales también lo usaban. Lo que pasa es que esperaban a que naciera y entonces le cortaban la cabeza», ha añadido.
Unas afirmaciones que más tarde ha suavizado: «Cuando uno se equivoca y mete la pata, lo mejor es pedir disculpas», ha matizado.
«Lo que he visto de él es una comparación bastante disparatada que nada tiene que ver con una ley en democracia para interrumpir voluntariamente el embarazo con garantía», ha subrayado Calvo.
A juicio de la ministra de Igualdad, la derecha es «poco responsable» al hablar de este asunto, que a su juicio no debería «entrar en danza política» porque son «derechos alcanzados por las mujeres» y recogidos en una ley que ofrece «seguridad».
«Conviene que un asunto tan importante como es el derecho que las mujeres teneos a controlar nuestro calendario y nuestro programa personal de la maternidad se tome con la seriedad que merece. Es un derecho sobre el control en relación a nuestros propios cuerpos», ha insistido la vicepresidenta.
En este sentido, ha asegurado que «no va a haber punto de retorno en lo que representa el derecho que las mujeres» tienen a controlar su maternidad con arreglo a sus deseos y aspiraciones.
«Es un asunto muy grave que desde luego no conviene en absoluto que nadie lo trate de manera absolutamente disparatada», ha zanjado.
