
Este jueves, la ley del “solo sí es sí” o Ley de Garantía Integral de la Libertad Sexual, que elimina la distinción entre abuso y agresión y regula la necesidad del consentimiento expreso, ha sido definitivamente aprobada en el Congreso tras estar en trámites como anteproyecto de ley desde el mes de mayo.
Esta ley, que tomó el nombre del grito feminista que salió a las calles tras la polémica sentencia de la Manada, que consideró abuso sexual la violación grupal, ha sido aprobada con 205 votos a favor, 141 en contra (PP y Vox) y 3 abstenciones (CUP).
Con esta ley, en el caso del consentimiento se eliminará que el silencio y la pasividad y signifiquen ‘sí’. Tendrá que haber una afirmación expresa, por lo que las mujeres víctimas de agresión sexual no tendrán que demostrar que hubo ningún tipo de intimidación.
Además, la sumisión química se considerará un agravante en los casos de violencia sexual, algo que hasta ahora solo se consideraba abuso, y se incluyen otros puntos como la violencia sexual online, donde se incluyen la pornografía no consentida o la extorsión a través de sexting.

Asimismo, los asesinatos por violencia sexual se contabilizarán como parte de la violencia contra las mujeres, aunque no formen parte de asesinatos en la pareja.
En las escuelas se pondrá el foco en la educación sexual para evitar futuros compartimientos de abusos y agresiones y se impondrá la obligación de que los agresores se formen en educación sexual como parte de su condena.
En los centros de atención psicológica, jurídica y social tanto para las víctimas como para los familiares o personas de su entorno, así como en las “casas de niños” se reforzará la protección 24 horas.
La trata y la prostitución se quedan fuera de la ley
Puntos como la trata y la prostitución, que provocaron ciertos conflictos internos entre los partidos del Gobierno se han dejado fuera de esta ley.
En opinión de Gregorio Gómez Mata, secretario de la asociación Alma contra la violencia de género, estos puntos no se abordarán en un futuro porque mueven mucho dinero. Además, considera que a los padres denunciados por violencia de género y especialmente por violencia vicaria hay que quitarle la custodia de los menores.
Bulos
Desde que se inició la tramitación de esta ley han circulado bulos por redes sociales que desde El HuffPost se han encargado de recoger y desmontar.
- Contrato para mantener relaciones sexuales
A pesar de lo que se está difundiendo no se está distribuyendo ningún modelo de contrato que formalice el consentimiento para poder mantener relaciones sexuales. “Solo se entenderá que hay consentimiento cuando se haya manifestado libremente mediante actos que, en atención a las circunstancias del caso, expresen de manera clara la voluntad de la persona”. En ningún caso hace falta un contrato físico ni una pregunta expresa, según el Ministerio de Igualdad.
- Ningún hombre pasa a ser culpable directamente
En redes sociales y foros, tras la aprobación de esta ley, han circulado mensajes como los siguientes: “Los hombres dejan de ser inocentes”, “no tendrán presunción de inocencia”, “se acusa al hombre solo con la palabra de la mujer” o “esta ley puede destrozar la vida de los hombres”, mensajes alejados totalmente de la realidad.
Patricia Peris Remón, docente del Máster Oficial en Intervención Interdisciplinar en Violencia de Género de VIU, ha explicado que ningún hombre debería verse amenazado por esta ley si no tiene intención de agredir sexualmente a nadie.
“Antes se ponía muy el foco en la víctima y si ella no trasladaba una reacción física para resistirte, si te quedabas callada o bloqueada, no habías opuesto resistencia”, señala. “Puedes quedarte bloqueada, puedes llorar o disociarte de tu cuerpo para que la sensación pase lo más rápido posible, hasta ahora si eso pasaba se le restaba credibilidad a la víctima”, añade.
Además, la presunción de inocencia es un derecho constitucional recogido en el artículo 24, por lo que cualquier ley está por debajo de él. En los casos en los que la mujer dé su consentimiento y luego se arrepienta, varios expertos entrevistados en Newtral señalan que será el juez quien decida en qué circunstancias lo retiró y en base a qué.
- Un piropo no será motivo para que metan a alguien en la cárcel
El acoso callejero, que tendrá el carácter de delito leve, será penado con de 5 a 30 días de localización permanente y el mismo tiempo de trabajos en beneficio de la comunidad, entre otras sanciones.
Sin embargo, este acoso callejero no son los piropos dichos con respeto. Sí lo es que un señor te espere sistemáticamente en el banco que está delante de tu portal, que cada vez que te lo encuentras en tu trabajo, te mira, se toca el pene o te hace un gesto guarro o que que te persiga por la calle cuando estás intentando meter las llaves en tu portal, ha explicado la secretaria de Estado de Igualdad y contra la Violencia de Género, Ángela Rodríguez Pam.
- Las mujeres víctimas de violencia sexual no van a tener una “paguita” de por vida
La ultraderecha se ha encargado de difundir el bulo de que una mujer que denuncie violencia sexual recibirá una paga vitalicia por denunciar simplemente a un hombre presuntamente inocente. Esto es totalmente falso.
Solo percibirán una ayuda económica aquellas víctimas de violencia sexual cuyo sueldo sea menos del salario mínimo. Recibirán una prestación equivalente a seis meses de subsidio por desempleo y será mayor si tiene discapacidad o personas a su cargo. Además, las víctimas de violencia sexual y de violencia vicaria recibirán ayudas para la reparación de los daños sufridos.
Peris Remón destaca que gracias a esta ley a las migrantes que no tienen una situación administrativa regular y son víctimas de violencia sexual no se les abrirá un expediente de expulsión.
- En el colegio no se enseñarán posturas sexuales
Una cosa buena de esta ley es que indirectamente va a favorecer al matrimonio formal y ataca al “sexo recreativo”, espero que no se abuse de esta legislación y destrocen la vida de inocentes como ya ha pasado den otras partes (pueden buscar “feministas en Reynosa” en Google para que vean lo que puede suceder)