El economista de Izquierda Unida Eduardo Garzón, hermano del actual ministro de Consumo y líder de IU, Alberto Garzón, ha sembrado un extraña polémica tras publicar un hilo en Twitter en defensa de la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) a 950 euros. Extraña porque, obviamente, no está pidiendo que cierren las empresas, sino que se razone con coherencia que es un aumento asumible,
Al defender la medida llevada a cabo por el Gobierno del PSOE y Unidas Podemos, Eduardo Garzón ha indicado que «si una empresa no puede pagar unos míseros 950 euros al mes, entonces mejor que desaparezca. Ya hará la misma actividad otra empresa o institución más capaz y competitiva».
Garzón ahonda en su razonamiento: «Imaginemos que algún hipotético negocio no puede funcionar pagando el nuevo salario mínimo. ¿De verdad queremos un país en el que las empresas sólo puedan salir adelante pagando salarios inferiores al nivel mínimo necesario para subsistir?».
«¿Cuánto más coste tendrán que soportar? Incluyendo las cotizaciones sociales, unos 80 euros cada mes por trabajador. ¿De verdad alguien se piensa que los empleadores no pueden permitirse ese aumento?», argumenta.
«Piénsalo: los empleadores contratan trabajadores porque gracias a ellos obtienen beneficios, ¡y ningún empleador contrata a una persona para sólo obtener sólo 80 euros mensuales de beneficio! Lo hacen para obtener mucho más. Así que se lo pueden permitir claramente», zanja.
Si esa empresa no puede pagar unos míseros 950 euros al mes, entonces mejor que desaparezca. Ya hará la misma actividad otra empresa o institución más capaz y competitiva.
— Eduardo Garzón (@edugaresp) January 23, 2020
