Xan Pereira Castro
Ante los acontecimientos ocurridos en Caracas durante la madrugada de ayer, 30 de abril de 2019, donde grupos militares y de la derecha venezolana liderados por el diputado de la Asamblea Nacional Juan Guaidó, han realizado un llamamiento a la población de Venezuela para que se sume a un alzamiento militar contra el gobierno de aquel país, quiero manifestar mi rechazo.
La difícil situación que atraviesa la democracia venezolana y la población del país deben dar lugar a un proceso de dialogo social y político para encontrar soluciones democráticas entre los propios venezolanos. Ninguna estrategia de golpe de estado institucional o militar promovidas desde Estados Unidos o líderes de derecha sudamericana conseguirán soluciones legítimas y duraderas para Venezuela y, especialmente, para el bienestar de su población.
El rechazo del gobierno en funciones de España a la estrategia del diputado venezolano, censurando claramente en las palabras de la ministra en funciones Celáa cualquier tipo de golpismo militar y desprotección de la población civil. En este sentido, es positiva la posición del gobierno en funciones de España, contrario a acciones como el intento de golpe militar, así como al llamado a soluciones pacíficas, lo que supone un cambio de estrategia del gobierno en funciones de Pedro Sánchez que, en su momento, apoyó al autoproclamado presidente Juan Guaidó.
España debe dar un paso más en este sentido, asumiendo que toda solución para el futuro de Venezuela, incluyendo la convocatoria de elecciones, debe ser producto del diálogo entre el gobierno y el resto de actores sociopolíticos del país, incluyendo, por supuesto, a la oposición democrática.
Declaraciones como las del presidente del Parlamento Europeo, Antonio Tajani, celebrando el golpe militar resultan inaceptables, frívolas, irresponsables y de paupérrima calidad democrática.
La situación de Venezuela requiere que la comunidad internacional asuma un papel responsable para garantizar la paz, el bienestar de la población y el pleno ejercicio del estado de derecho. Posicionamientos como el del gobierno de Estados Unidos, acatado y replicado por la mayoría de gobiernos de derecha de la región (agrupados en el conocido como Grupo de Lima), y apoyados en España por Vox, Partido Popular y Ciudadanos, no hacen más que favorecer estrategias de intervencionismo, ahogamiento económico y al golpismo, que en esta ocasión han dado un paso más involucrando a la fuerza militar, con los riesgos para la integridad de la población civil que eso supone.
Ante la antidemocrática estrategia de Donald Trump y los líderes del Grupo de Lima, Jair Bolsonaro, Iván Duque y Mauricio Macri, entre otros, el gobierno en funciones de España y el que se constituya como resultado de las elecciones del pasado domingo 28 de abril, deben liderar en la Unión Europea una posición común responsable, comprometida con la paz y con el diálogo político para encontrar soluciones a los problemas del pueblo venezolano.