El hambre como arma de guerra hace mella en el norte de Gaza
The Guardian: “Aquí, en el norte de Gaza, prácticamente no hay alimentos disponibles. La gente está recurriendo a comer pienso o alpiste para mantenerse con vida. Algunos solo tienen hierba para comer.”
La situación es crítica: la iniciativa de Clasificación Integrada de las Fases de Seguridad Alimentaria, de la ONU, advierte que la hambruna es “inminente” en Gaza. Más del 50% de la población gazatí enfrenta niveles catastróficos de hambre, con niños que ya mueren por desnutrición y deshidratación. Mientras tanto, Israel continúa estrangulando la ayuda humanitaria en los pasos fronterizos, mientras la comunidad internacional observa inerte.
En medio de la desesperación, las familias gazatíes enfrentan decisiones imposibles: “Algunas personas que he conocido sobreviven con una taza de café al día”, relata Shalabi. La escasez ha llevado a una pérdida de peso generalizada, con personas perdiendo entre 10 y 30 kilos. Los niños, víctimas silenciosas, salen a las calles con platos vacíos, clamando por comida.
El norte de Gaza se sumerge en una crisis humanitaria sin precedentes. Bajo el implacable asedio de Israel, sus habitantes luchan por sobrevivir entre la escasez extrema de alimentos. Mahmoud Shalabi, director de la organización caritativa Medical Aid for Palestinians en Gaza, expone una realidad desgarradora en