El movimiento encabezado por el Sindicat d’Inquilins i Inquilines se ha concentrado delante del edificio de Interior en Barcelona para denunciar que la Generalitat ha puesto 364 multas «por ir aparar desahucios», que representa un total de 206.141€.

Durante el segundo trimestre de 2021 ha habido 2.624 desahucios en Catalunya, «40 al día». En este sentido el Sindicat afirma que «el movimiento por la vivienda es el único que se mueve para evitar esta barbarie», pero estos, solamente, tienen como respuesta «la represión.

La mayoría de estas sanciones, según datos de Interior, son de 601 euros, la más baja estipulada para infracciones graves de dos tipologías: «obstrucción a la justicia» (artículo 36.4) y desobediencia (artículo 36.6).

Esta situación, explica Jaime Palomera, portavoz del Sindicat, «representa un uso sin precedentes de la Ley mordaza contra quien defiende pacíficamente el derecho a la vivienda y esto no pasa en ningún otro lugar».

A través y a raíz de esta movilización desde el Sindicat exigen « la retirada de todas las multas, no utilizar la Ley Mordaza en los desahucios y suspender todos los lanzamientos».

«Los Mossos son la única policía que está multando sistemáticamente a quien quiere paralizar los desahucios. Esto no pasa en ningún otro territorio y  es una decisión política que alguien ha tomado en Cataluña», añade.

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