En un dramático suceso, un imponente edificio de 14 alturas ha quedado reducido a su estructura tras ser consumido por un incendio de proporciones devastadoras. El siniestro, que se desató en el interior del edificio, arrasó con la totalidad de las 138 viviendas que albergaba, dejando a los residentes sin hogar.
La rapidez con la que las llamas se propagaron se convirtió en el foco de atención de los expertos que analizaron los primeros informes sobre el incendio. Esther Puchades, una especialista que evaluó el edificio hace algunos años, reveló que la fachada estaba revestida con poliuretano, un material altamente inflamable.
En sus declaraciones a À Punt, explicó que este componente fue el responsable de que el edificio ardiera en menos de media hora. Puchades señaló que en 2005, año de construcción del edificio siniestrado, el poliuretano no tenía la mala reputación que tiene hoy y que, al menos en la actualidad, no se utiliza de la misma manera, recordando incidentes anteriores como el incendio en la torre Grenfell de Londres en 2017.

Antonio Hospitaler, profesor de la Universidad Politécnica de Valencia, destacó que varios factores de riesgo contribuyeron a la tragedia. En una entrevista en el Canal 24 Horas, explicó que los incendios se propagan más rápidamente en las fachadas que al aire libre debido a la adherencia de las llamas al material combustible de construcción, haciendo especial mención al poliuretano. Además, señaló la complicación adicional causada por el viento.
La calidad del inmueble también ha sido objeto de críticas por parte de algunos residentes. Uno de ellos, en declaraciones al Canal 24 Horas, lo describió metafóricamente como “de cartón-piedra”, aunque un agente inmobiliario de la zona ha salido en defensa del edificio. Según este profesional, se trata de una estructura de “calidad media-alta, dividida en dos partes interconectadas”.
Este trágico incidente pone de manifiesto la importancia de la seguridad en la construcción y la elección de materiales resistentes al fuego. Las autoridades locales deberán llevar a cabo investigaciones exhaustivas para esclarecer las causas del incendio y tomar medidas que eviten que tragedias similares ocurran en el futuro.