Meta permitirá a los usuarios de Facebook e Instagram a llamar a la violencia contra los rusos y los soldados rusos en el contexto de la invasión de Ucrania, según Reuters el jueves, en un cambio temporal a su política de discurso de odio.
La agencia de prensa ha informado que las plataformas también están permitiendo temporalmente pedir la muerte del presidente ruso Vladimir Putin o al presidente bielorruso Alexander Lukashenko.
«Como resultado de la invasión rusa de Ucrania, hemos tenido en cuenta temporalmente formas de expresión política que normalmente violarían nuestras reglas, como el discurso violento de desear la ‘muerte a los invasores rusos’. «Todavía no permitiremos llamados creíbles a la violencia contra civiles rusos», dijo un portavoz de Meta en un comunicado.
Estas convocatorias de muerte se permitirán a menos que contengan otros objetivos o tengan dos indicadores de credibilidad, como la ubicación o el método, se informó en un correo electrónico, lo que representa un cambio reciente a las reglas de la compañía sobre violencia e incitación.
«Como resultado de la invasión rusa de Ucrania, hemos permitido temporalmente formas de expresión política que normalmente violarían nuestras reglas, como un discurso violento como ‘muerte a los invasores rusos’», dijo un portavoz de Meta a CNN Business.
Los correos electrónicos también mostraron, por el contrario, que Meta permitiría elogiar al batallón de derecha Azov, «que normalmente está prohibido», indican desde CNN.
El portavoz de Meta, Joe Osborne, dijo anteriormente que la compañía estaba «por el momento, haciendo una pequeña excepción para elogiar al Regimiento Azov estrictamente en el contexto de la defensa de Ucrania, o en su papel como parte de la Guardia Nacional de Ucrania».
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Es un aviso: el capitalismo salvaje no tiene aliados, solo intereses.
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Algun comentario sobre el uso de reclutas y la importacion de asesinos profesionales chechenos y sirios por parte del progesista, ecologista y democrata Vladimir Putin?
Sí. Que aquí todos se manchan las manos de sangre, incluidos los demócratas de la UE (incluido nuestro gobierno progresista y demócrata), OTAN, USA y el gobierno ucraniano. Ellos ponen las guerras y nosotros los muertos.
Y no hay que olvidarse de los canales de manipulación de la "opinión pública", Instagram, Facebook...
'The Craft of Intelligence'
“El oficio de la inteligencia”.
En 1963, Allen Dulles escribe el libro 'The Craft of Intelligence' (el arte de la inteligencia) donde explicita:
«Sembrando el caos en la Unión Soviética sustituiremos sus valores, sin que sea percibido, por otros falsos, y les obligaremos a creer en ellos. Encontraremos a nuestros aliados y correligionarios en la propia Rusia. Episodio tras episodio se va a representar por sus proporciones una grandiosa tragedia, la de la muerte del más irreductible pueblo en la tierra, la tragedia de la definitiva e irreversible extinción de su autoconciencia. De la literatura y el arte, por ejemplo, haremos desaparecer su carga social. Deshabituaremos a los artistas, les quitaremos las ganas de dedicarse al arte, a la investigación de los procesos que se desarrollan en el interior de la sociedad. Literatura, cine, teatro, deberán reflejar y enaltecer los más bajos sentimientos humanos. Apoyaremos y encumbraremos por todos los medios a los denominados artistas que comenzarán a sembrar e inculcar en la conciencia humana el culto del sexo, de la violencia, el sadismo, la traición. En una palabra: cualquier tipo de inmoralidad.
En la dirección del Estado crearemos el caos y la confusión. De una manera imperceptible, pero activa y constante, propiciaremos el despotismo de los funcionarios, el soborno, la corrupción, la falta de principios. La honradez y la honestidad serán ridiculizadas [como] innecesarias y convertidas en un vestigio del pasado. El descaro, la insolencia, el engaño y la mentira, el alcoholismo [y] la drogadicción, el miedo irracional entre semejantes, la traición, el nacionalismo, la enemistad entre los pueblos y, ante todo, el odio al pueblo ruso; todo esto es lo que vamos a cultivar hábilmente hasta que reviente como el capullo de una flor.
Sólo unos pocos acertarán a sospechar e incluso comprender lo que realmente sucede. Pero a esa gente la situaremos en una posición de indefensión, ridiculizándolos, encontrando la manera de calumniarlos, desacreditarlos y señalarlos como desechos de la sociedad. Haremos parecer chabacanos los fundamentos de la moralidad, destruyéndolos. Nuestra principal apuesta será la juventud. La corromperemos, desmoralizaremos, pervertiremos (...)».
Nada nuevo. Iraquíes, libios, vietnamitas, laosianos, camboyanos, paquistaníes, mejicanos, guatemaltecos, chinos, coreanos....
Además, es sólo es momentáneo. Luego los resucitarán y aquí no ha pasado nada.
Dulles escribía en 1963
'The Craft of Intelligence'
“El oficio de la inteligencia”.
En 1963, Allen Dulles escribe el libro 'The Craft of Intelligence' (el arte de la inteligencia) donde explicita:
«Sembrando el caos en la Unión Soviética sustituiremos sus valores, sin que sea percibido, por otros falsos, y les obligaremos a creer en ellos. Encontraremos a nuestros aliados y correligionarios en la propia Rusia. Episodio tras episodio se va a representar por sus proporciones una grandiosa tragedia, la de la muerte del más irreductible pueblo en la tierra, la tragedia de la definitiva e irreversible extinción de su autoconciencia. De la literatura y el arte, por ejemplo, haremos desaparecer su carga social. Deshabituaremos a los artistas, les quitaremos las ganas de dedicarse al arte, a la investigación de los procesos que se desarrollan en el interior de la sociedad. Literatura, cine, teatro, deberán reflejar y enaltecer los más bajos sentimientos humanos. Apoyaremos y encumbraremos por todos los medios a los denominados artistas que comenzarán a sembrar e inculcar en la conciencia humana el culto del sexo, de la violencia, el sadismo, la traición. En una palabra: cualquier tipo de inmoralidad.
En la dirección del Estado crearemos el caos y la confusión. De una manera imperceptible, pero activa y constante, propiciaremos el despotismo de los funcionarios, el soborno, la corrupción, la falta de principios. La honradez y la honestidad serán ridiculizadas [como] innecesarias y convertidas en un vestigio del pasado. El descaro, la insolencia, el engaño y la mentira, el alcoholismo [y] la drogadicción, el miedo irracional entre semejantes, la traición, el nacionalismo, la enemistad entre los pueblos y, ante todo, el odio al pueblo ruso; todo esto es lo que vamos a cultivar hábilmente hasta que reviente como el capullo de una flor.
Sólo unos pocos acertarán a sospechar e incluso comprender lo que realmente sucede. Pero a esa gente la situaremos en una posición de indefensión, ridiculizándolos, encontrando la manera de calumniarlos, desacreditarlos y señalarlos como desechos de la sociedad. Haremos parecer chabacanos los fundamentos de la moralidad, destruyéndolos. Nuestra principal apuesta será la juventud. La corromperemos, desmoralizaremos, pervertiremos (...)».