Alberto Núñez Feijóo, líder del Partido Popular, aspira a gobernar en solitario, a pesar de que ninguna de las encuestas publicadas hasta ahora le otorga esa posibilidad. Sin embargo, al igual que ocurre en algunos ayuntamientos y gobiernos autonómicos surgidos de las últimas elecciones, su estrategia pasa por pactar con Vox. Estos acuerdos, como el alcanzado en la Comunidad Valenciana, obligan al líder del PP a realizar malabarismos en relación a ciertos temas, como el de la violencia de género.
Anoche, durante una entrevista en la Cadena SER, Feijóo justificó los pactos entre el PP y Vox alcanzados hasta ahora en los ayuntamientos y comunidades autónomas, así como la falta de menciones a la violencia de género en los documentos programáticos. “La violencia machista es una obviedad, y lo obvio no debe llamarnos la atención de que no esté en los textos”, señaló asegurando que no existe una línea en dichos acuerdos que niegue la existencia de la violencia machista.
Sin embargo, no ha pasado desapercibida la mención que hizo Feijóo al ex candidato de Vox a la Generalitat Valenciana, Carlos Flores, quien fue condenado por violencia de género contra su exmujer.
El político gallego aseguró: “Hace 20 años, es verdad. Es un catedrático de Derecho Constitucional, es verdad. Ha cumplido la sanción, es verdad. Se ha producido hace 20 años, es verdad. Tuvo un divorcio duro y conllevó un abuso verbal hacia su exmujer”.
La reacción a las palabras del líder del PP sobre Carlos Flores fue inmediata. En Twitter se generó una gran controversia y gran parte del Gobierno acusó a Feijóo de justificar la violencia de género al referirse a un “divorcio duro” en relación al condenado de Vox Valencia.
La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, fue una de las primeras en responder al presidente del PP, recriminándole: “No es un divorcio duro, se llama violencia machista”, en un mensaje publicado en Twitter.
No es un divorcio duro, se llama violencia machista. https://t.co/vWVdcnidKE
— Yolanda Díaz (@Yolanda_Diaz_) June 19, 2023
María Jesús Montero, vicesecretaria general del PSOE y ministra de Hacienda, también acusó a Alberto Núñez Feijóo de justificar la violencia de género. Citando textualmente las palabras de Feijóo, agregó: “España no merece un presidente que justifique la violencia contra las mujeres”.
“Tuvo un divorcio duro y conllevó un abuso verbal hacia su ex mujer”, dice Feijóo sobre el lider de VOX en la Generalitat Valenciana condenado por violencia de género.
España no se merece un presidente que justifique la violencia hacia las mujeres.
— María Jesús Montero (@mjmonteroc) June 19, 2023
Adriana Lastra, candidata socialista al Congreso de los Diputados, manifestó estar “atónita” con las palabras de Feijóo y compartió un tuit que recordaba los insultos proferidos por Flores hacia su exmujer, por los cuales fue condenado. “Para Feijóo esto es tener un ‘divorcio duro'”, ha criticado la exdiputada, un mismo mensaje que también ha compartido la portavoz del PSOE y ministra de Educación, Pilar Alegría y el presidente del Senado, Ander Gil.
Para Feijóo, esto es tener “un divorcio duro”.
Estoy atónita. https://t.co/IOCW9vdXTF— Adriana Lastra (@Adrilastra) June 19, 2023
La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, instó a Feijóo a rectificar sus palabras. “No fue un divorcio duro, fue una condena por maltrato psicológico a una mujer. La violencia machista no admite eufemismos. Rectifique, señor Feijóo, o el discurso de la ultraderecha le absorberá por completo”, escribió en Twitter.
No fue un "divorcio duro", fue una condena por maltrato psicológico a una mujer. La violencia machista no admite eufemismos.
Rectifique, señor Feijóo, o el discurso de la ultraderecha le absorberá por completo. https://t.co/Oq63IO7cNZ
— Raquel Sánchez (@raquelsjimenez) June 19, 2023
Las declaraciones de Núñez Feijóo generaron un intenso debate sobre la postura del Partido Popular respecto a la violencia de género y sus pactos con Vox. Muchos consideraron inaceptable que se minimizara o se justificara la gravedad de este problema social.
Las críticas no solo provinieron de representantes políticos, sino también de diversas organizaciones y colectivos que luchan contra la violencia de género. Demandaron un compromiso firme y contundente en la defensa de los derechos de las mujeres y en la lucha contra esta lacra.
El señor Feijo también tubo unas relaciones mafiosas. ( éé el barco)