Francia recordó este sábado el ataque cometido hace justo un año por un yihadista en la pequeña ciudad de Carcasona y la localidad de Trèbes, en el que fueron asesinadas cuatro personas, entre ellas el gendarme Arnaud Beltrame, al que desde entonces se considera un héroe por su actuación ese día.
El primer ministro francés, Édouard Philippe, fue el encargado de pronunciar un discurso solemne en Trèbes en homenaje a las víctimas y se detuvo en particular en la figura de Beltrame, que se canjeó por uno de los rehenes que el terrorista, Radouane Lakdim, había tomado en un supermercado donde se pertrechó.
El coronel murió a causa de las cuchilladas que le dio en el cuello Lakdim al cabo de varias horas de secuestro. El propio terrorista fue abatido momentos después por las fuerzas del orden que dieron el asalto.
Philippe, que descubrió una placa con los nombres de las cuatro víctimas mortales del atentado -también hubo dos heridos graves- señaló que “más allá de la abnegación (…) el coronel Beltrame ponía su bravura al servicio de sus convicciones”.
“Se distinguió toda su vida por la constancia y la excelencia de su compromiso al servicio de Francia”, destacó.
La acción terrorista de Carcasona y Trèbes puso en evidencia que tampoco una zona rural como esa estaba a resguardo del yihadismo en Francia.
Lakdim, marroquí de origen y nacionalizado francés, de 25 años, estaba fichado por los servicios secretos por radicalismo islámico y había vivido la mayor parte de su vida en Carcasona.