El Ministerio de Industria ha convocado, “con carácter de urgencia”, la mesa multilateral sobre el futuro de la planta de Alcoa en Cervo (Lugo) para este martes a las 17,30 horas. El comité de empresa recibió la citación este lunes a través de un correo electrónico remitido “siguiendo instrucciones del secretario general de Industria y de la Pyme”.
Tras frustrarse la venta a Liberty y también una operación a través de la SEPI, el secretario general de Industria y Pyme, Raúl Blanco, se fijó el objetivo de que la planta no pare “en ningún caso”.
BNG y la nacionalización de Alcoa
La portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, dijo en una visita a los trabajadores que la multinacional ha demostrado en los últimos tiempos que “su hoja de ruta es muy clara, que su plan es cerrar esta fábrica única y exclusivamente por decisiones empresariales”. Así, ha pedido a la Xunta de Galicia y al Gobierno español que sigan el ritmo, “porque tienen en sus manos mantener el empleo y la actividad”.
“La solución es muy clara, como lo defendió el BNG en los últimos meses: una intervención pública, una nacionalización, que asegure que las tinas no se cierren y que la región seguirá teniendo futuro”, dijo Ana Pontón.
Pontón llamó a Sánchez y Feijóo “a dejar de esconderse y enfrentarse, a estar a la altura de lo que exige esta región, que es la nacionalización de Alcoa”. Según explicó, los gobiernos llevan una semana estancados después de que la multinacional detuviera la OPA. Para el BNG, está claro que Alcoa está en una posición en la que quiere cumplir su propósito de paralizar esta planta, cuando lo que interesa a los gallegos es seguir produciendo y manteniendo la industria, porque esto es vital en una región como A Mariña”, señaló.
15 Días
Por su parte, la multinacional estadounidense apuntó al plazo de 15 días que tiene para aplicar el despido colectivo que pretende llevar adelante, sin acuerdo con el comité, y que afectaría a un total de hasta 543 trabajadores (de la planta de aluminio).
En este escenario transcurre la huelga indefinida convocada en ambas factorías, la de aluminio y la de alúmina, “sin ningún incidente” dentro de la planta y con trabajadores bloqueando la salida de la mercancía en el exterior.