Las reglas fiscales para quienes poseen criptomonedas experimentarán cambios significativos este año, ya que la Agencia Tributaria dispondrá de acceso a datos detallados de todas las transacciones relacionadas con estos activos durante 2023. Esta medida, parte de la primera campaña de las nuevas declaraciones informativas, implica que los intermediarios deben proporcionar información detallada sobre dichas operaciones.
Es importante recordar que las ganancias obtenidas mediante transacciones con criptomonedas siempre han estado sujetas a tributación en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Sin embargo, a partir de este año, se requiere información adicional con el objetivo de que Hacienda realice un seguimiento más riguroso de estos contribuyentes.
Según informa EFE, a partir de este año, todas las personas que hayan poseído o realizado operaciones con criptomonedas durante 2023 deberán incluir dicha información en las nuevas declaraciones informativas, que deben presentarse entre el 1 y el 31 de enero de 2024. La única excepción es el modelo 721, cuyo plazo de presentación comienza el 1 de enero y finaliza el 31 de marzo de 2024.
Estos modelos informativos son el 172, el 173 y el 721, cada uno con su contenido específico. El modelo 172 detalla el saldo de monedas virtuales al 31 de diciembre, incluyendo la identificación del titular, el tipo de moneda y su valor en euros.
Por otro lado, el modelo 173 abarca información detallada sobre todas las operaciones realizadas a lo largo de 2023: tipo de operación (adquisición, entrega, permuta o transferencia), tipo de moneda, cantidad de unidades de moneda involucradas, valor en euros, así como comisiones y gastos asociados.
Además de estas declaraciones, aquellos contribuyentes que posean más de 50.000 euros en criptomonedas en el extranjero al cierre del año deberán presentar el modelo 721, si la custodia de las claves criptográficas está fuera de España.
Es crucial destacar que estos modelos informativos no conllevan una carga tributaria adicional al Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Únicamente implican proporcionar información a Hacienda. Las ganancias patrimoniales derivadas de operaciones con criptomonedas se gravan como renta del ahorro, con tasas que van desde el 19% hasta el 28%, dependiendo del monto de las ganancias.
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