Lynn Conway (1938, Mount Vernon, Nueva York) es una informática, inventora y activista trans estadounidense. Conway fue reclutada por IBM Research en Yorktown Heights, Nueva York, en 1964, y pronto fue seleccionada para unirse al equipo de diseño de arquitectura de computadoras y supercomputadoras avanzadas. Allí trabajo junto a John Cocke, Herbert Schorr, Ed Sussenguth, Fran Allen y otros investigadores de IBM del proyecto ACS, inventando planificadores dinámicos para problemas de lanzamiento múltiple.
Tras enterarse de la investigación pionera del reputado endocrinólogo Harry Benjamin respecto al tratamiento de transexuales y darse cuenta de que la cirugía de reafirmación genital era posible, Conway solicitó su ayuda y se convirtió en su paciente. Conway contactó con Benjamin, quien aceptó proveerle asesoramiento y preescribirle una terapia de sustitución hormonal. Bajo el cuidado de Benjamin, Conway comenzó su cambio de sexo.
Llega el despido
Aunque guardaba la esperanza de poder hacer la transición sin perder el empleo, IBM la despidió en 1968 tras revelar su intención de cambiar de sexo a pesar de sus muchas contribuciones fundamentales a la arquitectura de computadoras.
Conway superó la adversidad que IBM le arrojó y trabajó como arquitecta de computadoras en Memorex Corporation antes de mudarse al Centro de Investigación Xerox Palo Alto. En los años 70 y 80 fue pionera en la nueva tecnología VLSI que ahora apuntala el diseño actual de chips de microprocesadores.
Más tarde, en 1985, la Universidad de Michigan la contrató como profesora de informática e ingeniería eléctrica y decana asociada de su escuela de ingeniería. Finalmente se retiró en 1998 con el título honorífico de profesora emérita.
La reivindicación para Lynn Conway
Ahora, Conway finalmente obtuvo la reivindicación que se merece después de que IBM se disculpó por sus acciones transfóbicas, después de haber evitado el problema durante décadas. “Lamentamos profundamente las dificultades que Lynn enfrentó”, dijo el gigante empresarial a Forbes, admitiendo toda la responsabilidad por el despido de Conway hace tantos años.
IMB acordó una resolución formal con Conway y, a principios de octubre, la compañía envió por correo electrónico a sus empleados una invitación para asistir a un evento virtual titulado “Lynn Conway, pionera en tecnología y transgénero en conversación con Diane Gherson”, vicepresidenta senior de recursos humanos de IBM.
Conway también recibió el excepcional premio IBM Lifetime Achievement Award, otorgado a personas que han cambiado el mundo a través de invenciones tecnológicas.