Li-Meng Yan es una viróloga e investigadora china. Yan es una denunciante que investigó el COVID-19 en la Universidad de Hong Kong, y que posteriormente abandonó la ciudad para ir a los Estados Unidos y cree que el gobierno chino, en connivencia con la Organización Mundial de la Salud, sabían de la transmisión de persona a persona de COVID-19 mucho antes de que se informara, incluso antes de publicar informes en sentido contrario.
Sus acusaciones contra las mencionadas partes no han sido nunca corroboradas con pruebas y su participación en la investigación relacionada con COVID-19 ha sido negada categóricamente por la Universidad de Hong Kong, donde trabajaba. Es sabido que sus trabajos no se han publicado en ninguna revista científica acreditada, de modo que nunca han sido revisados independientemente, y que la OMS no tiene constancia de que haya trabajado en laboratorios de referencia.
Aún así, Iker Jiménez, continuándo su deriva por postulados alejados de la realidad más allá de los ovnis que ya vaticinaba el periodista Pedro Vallín, ha decidido entrevistarla en su programa Cuarto Milenio.
La doctora ha respondido a lo esperado: ha respondido a las preguntas del programa desde una ubicación indeterminada en Estados Unidos, ya que se encuentra oculta en ese país, según indica, protegida por el FBI por descubrir los secretos de China y declaró que iba a relatar su mensaje tantas veces como pueda «antes de que me maten».
La doctora afirma que trabajó en Wuhan durante la pandemia, que gracias a ello pudo averiguar que el virus se estaba transmitiendo antes y en mayor medida de lo que China reconoció, y que el gobierno del país no ofreció la información la OMS. Se extendió afirmando que el coronavirus es un «arma biológica sin restricciones» y fue creado en laboratorio, «para atacar directamente al ser humano». Que su origen natural «no se sostiene» aunque «puede suceder» y que aunque en efecto su base es un virus de murciélago, luego fue modificado.
Señaló sobre sus afirmaciones que «hay publicaciones al respecto en 2017-18 de laboratorios militares» y que el virus fue liberado a propósito porque «no son tan estúpidos para que se escape por error. En esos laboratorios hay protocolos muy estrictos».
El informe sobre el que la doctora realiza su denuncia ha sido financiado por la Rule of Law Society, organización dirigida por el ideólogo de extrema derecha Steve Bannon, artífice de la campaña electoral de Donald Trump en 2016 y asesor de Vox (entre otros partidos de extrema derecha europeos), que en la actualidad detenido por fraude.
Si saliese adelante este informe, daría alas a las cuatro demandas que existen en Estados Unidos contra china, además de exonerar de responsabilidad al Presidente norteamericano de la gestión de la pandemia con cientos de miles de muertes a sus espaldas.