Octubre trae consigo un importante cambio en el ámbito laboral en España que afectará a cerca de tres millones de trabajadores. A partir del 1 de octubre, aquellos empleados que trabajan a tiempo parcial verán cómo sus jornadas parciales se equiparan al trabajo a tiempo completo en términos de periodo de cotización reconocido por la Seguridad Social.
Según la última Encuesta de Población Activa (EPA) realizada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), aproximadamente el 13,52% de los trabajadores en España, es decir, alrededor de 2.847.800 personas, trabajan a tiempo parcial.
Este cambio en la regulación tendrá un impacto significativo en la vida laboral de estos empleados y conllevará ventajas adicionales para acceder a prestaciones contributivas, como la pensión de jubilación o la pensión de incapacidad permanente.
En el caso de la jubilación, por ejemplo, para tener derecho a una pensión contributiva se exige haber cotizado durante un mínimo de 15 años, dos de los cuales deben encontrarse dentro de los 15 años previos a la jubilación.
Anteriormente, para aquellos que trabajaban a tiempo parcial, cada dos días trabajados contaban como un día cotizado. Esto significaba que, en caso de trabajar exclusivamente a tiempo parcial, eran necesarios 30 años de cotización para reunir el requisito necesario para recibir la pensión de jubilación contributiva. Sin embargo, a partir del 1 de octubre, cada día trabajado, independientemente del número de horas, será considerado como un día cotizado.
Es importante destacar que, a pesar de esta modificación, la base de cotización, que es el elemento principal para calcular la cuantía de una prestación contributiva, seguirá siendo proporcionalmente inferior en comparación con la de una jornada completa.
Este cambio normativo tiene su origen en dos sentencias relevantes: una del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) y otra del Tribunal Constitucional (TC). En mayo de 2019, el TEDH estimó que la legislación española podría dar lugar a una discriminación indirecta por razón de género, ya que el 75% de los trabajadores a tiempo parcial son mujeres.
Por su parte, en julio de 2019, el TC señaló que no reconocer los días trabajados a tiempo parcial como días cotizados completos constituía una discriminación indirecta por razón de género, dado que estadísticamente la mayoría de los trabajadores a tiempo parcial son mujeres.
Este cambio legal busca eliminar esta discriminación de género y brindar igualdad de oportunidades a todos los trabajadores, independientemente de su régimen de trabajo a tiempo parcial.