La Oficina Económica y Comercial de España en Riad describe en un reciente informe las “oportunidades” que existen en Arabia Saudí, un país señalado a nivel internacional por sus permanentes violaciones a los derechos humanos. Parece que hay negocios que España no quiere dejar escapar, y vender material de guerra aún siendo para masacrar a inocentes es uno de ellos.
La Oficina Económica y Comercial de España incluye la industria de defensa como uno de los sectores “prioritarios” en el apartado de “oportunidades comerciales”. Cita también otras áreas, como la agroalimentaria, la venta de bienes de equipos, materiales de construcción o energías renovables. Asimismo, considera “prioritaria” la inversión en los sectores de defensa, renovables, educación y formación profesional, gestión hospitalaria e infraestructuras de transporte.
El texto señala también que “la empresa española tiene campo para el crecimiento a través de una política a largo plazo de presencia en este mercado y a través del fomento de la inversión de empresas españolas en este país”. “Salvo una debacle en los precios del petróleo, que no es previsible, este país continuará siendo un importante mercado en los próximos años”, subraya.
Lla Oficina Económica y Comercial proporciona una serie de datos sobre las ventas realizadas en 2018 bajo el título “exportaciones bilaterales por capítulos arancelarios”, el estudio incluye “bombas, granadas, torpedos y demás municiones” por un valor de 104 millones de euros. Cita también el capítulo “armas de guerra”, que en 2018 supuso otros 27 millones de euros.
Yemen
El estudio aporta distintos detalles sobre la situación del país. pero apenas incluye menciones sobre los ataques lanzados por la coalición encabezada por Arabia Saudí contra Yemen. Algunos párrafos después menciona textualmente “los conflictos regionales, como por ejemplo el de Yemen”, para referirse a ciertos “factores” que, a su juicio, “ensombrecen las previsiones positivas de la economía saudí”.
Se calcula que mas de 10.000 personas han muerto en Yemen y mas de 40.000 han resultado heridas en una cruenta guerra y que sobre todo esta inmensa en una crisis humanitaria de hambruna y enfermedades, en gran parte azotada por el cólera. Además la ONU indica que 14,5 millones de personas no tienen acceso a agua potable segura y a infraestructuras de saneamiento adecuado, y 14,8 millones no cuentan con atención sanitaria. La OMS señala en su informe que el número de yemeníes que necesitan asistencia humanitaria ha aumentado de 18,8 millones a 20,7 millones desde enero de 2017.
Otras fuentes apuntan a que la cantidad de muertes sumando las muertes por hambrunas, enfermedades y fuego hostil, entre otras causas suman un total de 91.600 muertos.
“No existen elecciones”
“No existen partidos políticos ni elecciones nacionales, aunque en 2005 se celebraron las primeras elecciones municipales. En el 2011 pudieron votar las mujeres pero la población lo recibió con escaso entusiasmo”, señala la representación comercial de España en Riyadh en su informe sobre el régimen saudí.
“El rey tiene que lidiar con los principales problemas que afronta en este momento la más potente de las monarquías del Golfo: sus relaciones con Irán, las tensiones con Catar, la guerra en Yemen, el ascenso en la región de las fuerzas islámicas radicales, la caída de los precios del crudo y la presión interna y externa para la relajación de la ley islámica que regula férreamente la sociedad del país”, dice el documento en una de sus pocas alusiones a la situación que atraviesan los yemeníes.
El texto destaca que “durante el reinado del anterior rey se produjo una paulatino proceso de reformas sociales y económicas en Arabia Saudí y las previsiones son de que se siga en la senda marcada de ambiciosos programas de reformas y de modernización, acompañado de fuertes inversiones públicas”, por lo que prevé que “se continúe en la misma política”.