El Ministro de la Diáspora de Israel, Amichai Chikli, mostró este martes su decepción por la postura de España con respecto a la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA), a la que calificó como “Hamás”. Chikli afirmó que Israel está “extremadamente decepcionado” por la falta de retirada del financiamiento español a la agencia, después de las acusaciones contra algunos de sus empleados por presunta participación en el ataque del grupo islamista el 7 de octubre.
En una conferencia de prensa en Jerusalén, el ministro declaró a EFE que el Gobierno español está desempeñando un papel “muy negativo” al no retirar su apoyo financiero a la UNRWA. Chikli agregó que la UNRWA es “Hamás” y está liderada por dicho grupo islamista, indicando que Hamás no permitiría el funcionamiento de ninguna agencia en la Franja de Gaza que no esté alineada con sus intereses.
El ministro destacó que en Gaza, bajo el control de facto de Hamás desde 2007, las opciones son limitadas, y afirmó: “Gaza no es una entidad democrática, tienes básicamente dos opciones, una es ser Hamás y la otra ser arrojado desde el techo de algún edificio”. Además, señaló que la UNRWA es “muy corrupta” y acusó a los líderes de Hamás de colocar a sus familiares como empleados para recibir “salarios muy elevados”.
Israel sostiene que una docena de trabajadores de la UNRWA participaron en el ataque perpetrado por Hamás el 7 de octubre, desencadenando una guerra con lanzamiento de cohetes y la infiltración de milicianos que resultó en numerosas víctimas y secuestros en poblaciones israelíes cercanas a Gaza.
Aunque la UNRWA anunció el despido inmediato de 13 miembros de su personal y el inicio de una investigación, Estados Unidos y otros quince países suspendieron su financiamiento a la agencia. Sin embargo, España, entre otros, mantiene su apoyo financiero por el momento. La Unión Europea continúa su ayuda a los palestinos en Gaza y decidirá sobre la financiación de la UNRWA tras conocerse los resultados de la investigación.
El ministro Chikli recordó que Israel también estuvo “decepcionado” por las acciones del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, durante una gira en noviembre por Oriente Medio, donde cuestionó la actuación de Israel y abogó por el reconocimiento de un Estado palestino.