El cuello arcádico de Julieta une éxtasis y melancolía, se explica entre el agua y la elevación. El cuello es un recorrido ascendente, en la elevación se sublima. Con este inicio Blázquez Mateos lleva de la mano al lector por el universo de Julieta es un jardín (con un bosque interior), una obra que desde la primera frase despierta la sensibilidad del lector más exigente. 

Eduardo Blázquez Mateos invita al lector a un viaje sensitivo, un pulso entre su mirada y la del lector. Julieta es un jardín (con un bosque interior) es una obra para ser vivida, hecho posible gracias a la delicadeza con la que fue escrita. 

El ballet Romeo y Julieta bebe del manuscrito del Sueño de Polífilo, de Colonna. Julieta es Polia y vive en una isla con la diosa Venus. Polia, arquetipo celeste, es la dama durmiente que representa la luz y el conocimiento, neopetrarquista ideal que redime a la bailarina Julieta.

Julieta es la energía creadora que, aliada con Venus, se viste de Flora en el lienzo de Botticelli; ideal de belleza divina y pagana que, entre el amor sagrado y el amor profano, refleja la imagen neoplatónica de la belleza sublimada. Nureyev crea un ballet con el bello frenesí de los humanistas del Renacimiento.

Romeo y Julieta están liberados, parten del estado contemplativo para albergar el éxtasis; Nureyev quiere conciliar el frenesí del poeta con el furor dionisíaco. La idea del amor alado de Nureyev impregna a Julieta del relato de Eros y Psique, pilar para abordar los ballets. La bella Beatriz de Dante será un río que llegará a Julieta, alegoría de la verdad del amor, esencia de Eros, rayo solar esencial en el Renacimiento.

Ante la belleza ascendente de Julieta, unida a la escalera, en ocasiones, trenza-escalera, la dama recrea la ambivalencia ascendente y vertical en el marco del amor cortés. La concepción de Eros y Thánatos, como energías que estimulan los procesos creativos, define la dinámica del camino para deambular entre las míticas pérgolas.

Julieta bebe de la fuente de Adonis; contempla las aguas, espejo para peinarse la luminosa cabellera; asombra a las aves del paraíso; su belleza altera las rosaledas de la pérgola del jardín. Nureyev impregna de sabiduría y fortaleza a Julieta; la dama se registra en la luz neoplatónica, se alía con Apolo en la cima de su amor. Nureyev lleva a la doncella al registro dionisíaco ante la muerte. Romeo significa peregrino, deambula bailando, buscando a Julieta, crea un itinerario hacia la luz y el conocimiento simulando ser un espectro.

Los dos amantes viven el sueño eterno de Eros, sus movimientos y desplazamientos dorados se manifiestan entre dibujos y diseños de jardines, de parterres de bordado que Nureyev expresa con orgullo, el binomio danza-jardín aborda la historia del ballet desde el siglo XV hasta el Ballet Triádico.

Con música de Serguei Prokofiev, Rudolf Nureyev crea su sueño de Julieta —contando con Ezio Frigerio y Mauro Pagano— para el Ballet de la Ópera Nacional de París, que se estrena el 19 de octubre de 1984, en el Palais Garnier. Representando las visiones de Shakespeare sobre Italia, con una dramaturgia poderosa, con violencia dionisíaca, concibe el ballet como un jardín y una película que tienen su fuente en los jardines de Bóboli, el gran viaje de Julieta a la isla de Polia. 

Eduardo Blázquez Mateos es doctor en Teoría e Historia del Arte (UAM, 1995) y profesor titular de Estética y Teoría de las Artes de la Universidad Rey Juan Carlos (Madrid). Toda su obra establece un diálogo entre la historia, la mitología y la naturaleza representadas en el arte, con acercamientos al cine, la pintura y la danza. Ejemplos de ello son sus novelas sobre Isabel de Portugal a la luz de Las Tres Gracias, Luis de Borbón y el centauro, y la condesa de Chinchón y Ceres, o los ensayos El palacio de El Viso del marqués como Templo de la Fama (CSIC-CECEL), Cesare Arbassia y la literatura artística del Renacimiento (Universidad de Salamanca), Viajes al Paraíso. La representación de la naturaleza en las artes (Universidad de Salamanca), Renacimiento en la provincia de Ciudad Real (CECEL-Biblioteca de Autores Manchegos), La metamorfosis de la ciudad amurallada, El desnudo en el arte abulense, entre muchos otros. También entre sus libros están Ofelias en el cine, El sueño de Leonardo, Escenografías paisajísticas y artes escénicas, El reino veneciano de Tetis: la tumba de Jacinto, y El cristal de Neptuno. Es patrono del Museo de Pintura y Escultura de Manuel Aznar (Velada), además de director y dueño del Micromuseo de Diosas y de Ninfas (Guisando, Ávila).

DEJA UNA RESPUESTA