La Asociación Salvemos Cabana ha presentado alegaciones al documento ambiental de inicio de un proyecto que, aunque en apariencia poco relevante por la potencia que pretende instalar (2 aerogeneradores, 12 MW), sí supone un problema al valorar de manera conjunta los efectos sinérgicos y acumulativos de los otros parques eólicos promovidos en la zona por la multinacional portuguesa EDP Renovables, el Monte Chan (9 aerogeneradores, 46,2 MW) y el Pena dos Mouros (7 aerogeneradores, 35 MW).

Espacio natural protegido de la laguna y dunas de Traba, en Laxe (Foto: Asociación Salvemos Cabana).

De este modo, 18 aerogeneradores de gran porte (200 metros de altura en punta de pala) rodearían y ahogarían, literalmente, el Espacio Natural Protegido de la Laguna y Dunas de Traba, en Laxe, amparado por la Resolución autonómica 10/01/1990, integrado en la Red Natura 2000 y reconocido como uno de los tramos costeros más espectaculares de la Costa da Morte, formado por una playa de casi 2 kilómetros de longitud entre la Punta de Amado y la Punta de Traba, un conjunto dunar extraordinario y una laguna natural de altísimo valor ecológico.

Además, en el área donde pretende desarrollarse el complejo eólico integrado en esta infraestructura conjunta dividida artificialmente en tres proyectos, se encuentra el paisaje protegido de los Penedos de Pasarela y Traba, amparado por el Decreto 294/2008 y directamente afectado por el parque eólico Monte Chan, reconocidos en el texto legal de “merecedores de una protección especial” por “las características y singulares valores naturales, estéticos y culturales” que presentan.

En el caso del parque eólico Soesto, como en los otros dos proyectos, está, además, la afectación inasumible por la cercanía del conjunto infraestructturas proyectadas sobre la Zona Especial de Conservación (ZEC) Costa da Morte y la Zona de Especial Protección para las Aves Costa da Morte Norte, que según proyecto se encuentran en sus puntos más próximos a 335 y 875 metros respectivamente.

Para Salvemos Cabana hay que recordar que el emplazamiento proyectado de estos parques eólicos es susceptible de formar parte de la futura ampliación de la Red Natura 2000 en Galicia, medida reiteradamente solicitada por las autoridades europeas ante el significativo déficit que a nivel territorial mantiene la comunidad autónoma, pues la contribución del territorio gallego sigue siendo una de las más bajas a nivel estatal y de la UE, con tan sólo un 11,74% de superficie protegida. En este sentido, en tanto en cuanto en Red Natura 2000 sólo está permitida la repotenciación de infraestructuras eólicas existentes pero no su implantación, en áreas que potencialmente pueden llegar a formar parte a corto/medio plazo, no es razonable su instalación.

AFECCIÓN SOBRE ESPECIES EN PELIGRO

De entre los muchos impactos negativos que se desprenden del análisis de la documentación presentada a información pública por la promotora del parque eólico Soesto, aves y murciélagos se llevan la peor parte pues hasta la propia empresa reconoce que “se ha detectado la potencial presencia” del aguilucho cenizo (Circus pygargus) y el aguilucho pálido (Circus cyaneus), consideradas en estado vulnerable según el Catalogo Gallego de Especies Amenazadas, y también del murciélago de herradura grande (Rhinolophus ferrumequinum) y el murciélago ratonero grande (Myotis myotis), que se hallan en idéntica circunstancia.

Por otra parte, existe una clara interferencia con los planes de recuperación de especies en peligro de extinción al encontrarse el proyecto en el área de distribución potencial del chorlitejo patinegro (Charadrius alexandrinus L.) y la subespecie lusitánica del escribano palustre (Emberiza schoeniclus L. subsp.), amparados respectivamente por los decretos legislativos 9/2014 y 75/2013.

Los proyectos eólicos de EDP Renovables se encuentran en el área de distribución potencial del chorlitejo patinegro, en peligro de extinción / Wikimedia Commons

GALICIA AFRONTA A DÍA DE HOY UN ‘PRESTIGE 3.0’

Para la asociación. la realidad demuestra que, a día de hoy, el territorio gallego afronta un nuevo ‘Prestige’, sólo que en este caso se trata de un ‘Prestige 3.0’. Primero fue el dramático naufragio del petrolero en 2002, años después la invasión minera en proyectos irracionales como el aurífero de Corcoesto y, en la actualidad, el aluvión eólico incontrolado fruto de la burbuja especulativa que vive el sector de las energías renovables, actualmente impulsado gracias con un corpus legislativo diseñado a medida para favorecer la implantación forzosa de este tipo de proyectos que, ignorando el interés general y la protección del paisaje y la biodiversidad más preciados del noroeste, amenazan con sepultar el futuro de la naturaleza gallega.

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