Las irregularidades en algunas de las macrogranjas de porcino del grupo han sido motivo de denuncias por parte de Amigues de la Terra Valencia y otros colectivos

El lobo guardando las ovejas. Leticia Sanchiz Becquet ha sido nombrada Directora General de Producción Agrícola y Ganadera, un cargo que ejercerá bajo la Consellería de Agricultura, Ganadería y Pesca, cuyo Conseller es José Luis Aguirre Larrauri, representante de VOX. La organización Amigos de la Tierra ha identificado un conflicto de intereses en relación con este nombramiento y ha solicitado su dimisión. Esto se debe a que la nueva Directora General mantiene puestos directivos en empresas del sector ganadero porcino, específicamente en el Grupo Sanchiz.

Sanchiz Becquet desempeña roles directivos en 31 empresas valencianas como Inversiones Ganaderas Porcinas SL y Granja de Ves SL. También trabaja para División de Inversiones Agrícolas y Ganaderas SL, la empresa detrás de la polémica macrogranja de Ayora (Valencia). En total, ocupa cargos en 31 empresas, de las cuales 6 pertenecen al sector porcino en Valencia y otras 10 se ubican en Castilla La Mancha.

Diversos colectivos, incluido Amigues de la Terra Valencia, anteriormente protestaron contra la expansión de la macrogranja porcina en Ayora, alegando múltiples irregularidades. Argumentan que la empresa promotora obtuvo una subvención incluso antes de la aprobación de la Declaración de Impacto Ambiental, y la operación de la granja fue ilegal hasta su legalización en 2022.

La organización ha destacado el impacto negativo de la ganadería industrial, citando que en el País Valenciano hay más de 1.200.000 cabezas de porcino. Además, señalan que el Grupo Sanchiz opera numerosas macrogranjas con una significativa presencia en Castilla la Mancha.

La principal preocupación expresada por Amigos de la Tierra es que el nombramiento de Sanchiz Becquet pueda dar lugar a nuevas irregularidades y facilitar la expansión de la ganadería industrial. La organización solicita la dimisión de Sanchiz Becquet y aboga por una moratoria en la ganadería industrial, promoviendo en su lugar la ganadería extensiva.

Consideran inapropiado que se nombre a una persona con conexiones empresariales en el sector porcino como Directora General de Producción Agrícola y Ganadera. Critican a las empresas del grupo Sanchiz por adoptar un enfoque de “lavado verde”, promocionándose como sostenibles mientras ocultan los impactos negativos de sus operaciones.

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