La vietnamita Doan Thi Huong, única detenida por el asesinato en Kuala Lumpur de hermano del líder norcoreano, Kim Jong-un, se declaró hoy culpable después de que la fiscalía cambiara los cargos que se le imputan.
“Es muy posible que hoy salga en libertad”, declaró a los medios Salim Bashir, uno de los abogados de la acusada, a las puertas del Tribunal Superior de Shah Alam, informó el canal “Channel News Asia”.
La abogacía del Estado solicitó este lunes juzgar a Huong por el delito de “causar daño voluntario con un arma peligrosa”, penado con hasta 10 años de cárcel, frente al cargo de asesinato premeditado al que se enfrentaba, castigado con la pena de muerte, según documentos facilitados a los medios.
Huong y la indonesia Siti Aisyah, en libertad desde principios de marzo, asaltaron a Kim el 13 de febrero de 2017 en la terminal de salidas del aeropuerto de Kuala Lumpur, en una acción que Corea del Sur atribuyó a agentes norcoreanos.
Las dos mujeres mantienen su inocencia y aseguran que pensaban que participaban en una broma para un programa de televisión cuando frotaron el rostro de la víctima con una sustancia que ellas creían inofensiva, y que en realidad se trataba del agente nervioso VX, considerado por Naciones Unidas como arma de destrucción masiva.
Kim Jong-nam murió camino del hospital menos de media hora después de recibir el veneno.
El pasado 11 de marzo, la fiscalía retiró los cargos contra Aisyah gracias a la exitosa mediación del Gobierno indonesio y ella regresó a su país ese mismo día.
A diferencia de la indonesia, Huong aparece claramente en las imágenes del asalto a Kim y fue captada por las cámaras lavándose las manos instantes después en los lavabos del aeropuerto, lo que fue utilizado por la fiscalía como prueba de que sabía de la toxicidad del producto que utilizó.
Según la investigación de la policía malasia, el asesinato fue organizado por cuatro norcoreanos en paradero desconocido: Ri Ji-hyon, Hong Song-hac, O Jong-gil y Ri Jae-nam, quienes contrataron a las dos mujeres utilizando nombres y nacionalidades distintas.
Kim Jong-nam, hermano de Kim Jong-un por parte de padre, estuvo considerado en su día el favorito a heredar la jefatura del régimen norcoreano, pero cayó en desgracia en 2001 y vivió sus últimos años en el exilio.