Parece que Miguel Bosé se ha aficionado al negacionismo de todo tipo. El cantante, famoso en los últimos días por su activismo contra las vacunas del coronavirus más que por su música, acaba de perder la última batalla en los tribunales por “negarse” a pagar lo que le corresponde.
El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha desestimado un recurso de Bosé contra una multa de la Agencia Tributaria por deducirse indebidamente gastos de sus empresas, ya que en realidad eran de índole personal al tratarse desde la compra de jamones a reparaciones en su jardín.
Bosé se dedujo el IVA de gastos a través de Costaguana, una de sus empresas, como la compra de embutidos, tratamientos de fisioterapia, su entrenador personal, el renting de un coche de alta cilindrada, la seguridad de su chalet en Pozuelo de Alarcón o reparaciones en el jardín de su vivienda. Por todo ello reclama a la empresa 55.350,53 euros más otros 23.536,87 euros de sanción, según informa El País.
“Esos gastos no corresponden a la actividad desarrollada por Costaguana, sino que son gastos de índole personal o particular de Miguel Bosé y/o liberalidades y en ningún momento pueden considerarse deducibles en el IVA por no estar directamente afectadas a la realización de una actividad empresarial o profesional”, señala la Agencia Tributaria. “El examen de las facturas controvertidas permite constatar que es correcta la negativa de la administración a la deducción del IVA”, afirma.
Llama la atención la insistencia de Miguel Bosé con la evasión de impuestos, ya que al tema que hoy tratamos se suma que aún salió de la lista de morosos en 2019 tras adeudar 1,8 millones de euros, cuando hace unos años hablaba de la cantidad de impuestos que pagaba, “que son muchísimos”.
En 2014, Bosé fue entrevistado por el suplemento SModa del diario ‘El País’. El titular ya era llamativo: “Habría que cuestionar cómo pagamos impuestos”. Bosé hacía la siguiente afirmación: “Esta España no es la que yo quiero. Me llevan los demonios. Con todos los impuestos que he pagado, que son muchísimos”, a lo que añadía que “esto lo hemos financiado todos”.
Aunque el cantante veía con buenos ojos el pago de impuestos, afirmaba que: “los que tenemos privilegios, como yo, y vemos que con nuestros impuestos se está ayudando a quien no tiene (…) y de repente, llegan unos mangantes y, en muy poco tiempo, te quitan los derechos y se dedican a robar”. “Esto hay que pararlo. Basta ya. Y encima van de patriotas”, añadía.
Estas razones le llevaban a cuestionar el mismo pago de impuestos: “Yo, para que no los roben otros, prefiero autopignorármelos y cuando vea que la cosa ha cambiado, devolverlos con intereses y con IVA”.
Al término de la entrevista, Bosé fue más allá y pidió una reforma de la Constitución, ya que consideraba que “el primer encabezado debería decir: ‘el dinero público es sagrado. Quien lo toque o se lo lleve, lo devuelva con multa, cárcel y exclusión de profesión’. ¡Y no me tires más de la lengua!”.
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