El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, dijo este domingo al presidente colombiano, Iván Duque, que el aumento de la producción de cocaína es un problema heredado por su Gobierno.
Pompeo, que hizo hoy una breve visita a Cúcuta, ciudad de la frontera con Venezuela, para ver de cerca la crisis del país petrolero, se refirió a la alianza de Estados Unidos con Colombia en la lucha contra el narcotráfico, cuyos resultados ha criticado recientemente el presidente Donald Trump.
“Estados Unidos seguirá trabajando con usted para acabar con el problema de la producción de coca que usted heredó”, manifestó Pompeo a Duque, tan solo cuatro días después de que Trump volviera a cuestionar los resultados del Gobierno colombiano en la guerra contra las drogas.
El pasado 29 de marzo Trump acusó a Duque de no hacer “nada” por su país en materia de lucha contra las drogas, apreciación que reiteró el 10 de abril cuando afirmó que “desafortunadamente, el negocio de las drogas ha crecido un 50 % desde que está ahí (en el cargo)” el presidente colombiano.
Según un informe de la Casa Blanca divulgado a mediados del año pasado, en 2017, cuando el presidente de Colombia era Juan Manuel Santos (2010-2018) el área sembrada de coca en el país alcanzó un récord de 209.000 hectáreas, mientras que la producción potencial de cocaína pura subió hasta las 921 toneladas métricas.
Duque respondió entonces, sin citar a Trump, que en la lucha contra las drogas le rinde cuentas al pueblo colombiano e invocó el principio de la corresponsabilidad al señalar que en ese esfuerzo trabaja “de la mano con los países que quieran hacer este ejercicio de trabajo compartido”.
“Sabemos qué debemos hacer y Estados Unidos hará su parte para reducir la demanda de drogas ilegales en nuestro propio país”, reconoció este domingo el secretario de Estado.
Pompeo agradeció también a Duque “por su compromiso con Venezuela” así como “su cooperación en temas regionales como la lucha contra los narcóticos y la seguridad” en el continente americano.
El funcionario destacó que la “singular relación” de Estados Unidos con Colombia “va mucho más allá” de la lucha contra las drogas y abarca aspectos mucho más amplios como los acuerdos comerciales y otros compromisos.