La organización de Mujeres de la Matria Latinoamericana (Mumalá) inició este lunes en Argentina la preparación de una encuesta para obtener información sobre el acoso virtual y callejero que sufren las mujeres, con el fin de poder incidir en políticas que construyan una sociedad más segura.
En el marco de la Semana Internacional contra el Acoso Callejero, Mumalá comunicó que su observatorio, con la colaboración de voluntarios, comenzará la preparación de un sondeo que se realizará a 1.300 mujeres de diferentes clases sociales de entre 15 y 85 años en 16 provincias.
En la primera encuesta realizada en 2015 y orientada a la vía y al transporte público, detectaron que el 80 % de las mujeres se sienten inseguras al transitar dichos escenarios y que el 93 % sufrió alguna forma de acoso sexual callejero a lo largo de su vida.
Además, revelaron que el 100 % de las mujeres adoptan estrategias para sentirse más seguras en la vía pública, como por ejemplo, no usar vestimentas que consideren llamativas e ir acompañadas de alguien por la noche.
Los próximos resultados, que serán publicados en mayo, además de proporcionar información sobre el acoso en la vía pública -la encuesta sobre la inseguridad en el transporte la realizarán en torno agosto-, proporcionarán datos sobre el acoso virtual.
Según contó a Efe una de las coordinadoras de la mesa federal de Mumalá, Silvia Ferreyra, el acoso en las redes sociales es de uno de los espacios donde más violencia de género se ejerce y debe visibilizarse.
“A partir de los cambios culturales que se están dando a través de la tecnología hay toda una ‘reconceptualización’ de lo que es público y privado. Esto se manifiesta claramente en las redes sociales y nos parece que es un escenario donde las políticas públicas tienen mucho por hacer”, explicó Ferreyra.
La coordinadora explicó que, así como el código penal argentino contempla la penalización del “grooming” (engaño pederasta) porque “es un primer escenario para redes de trata”, no lo hace sobre otros tipos de violencia virtual.
Entre ellos, mencionó la publicación de vídeos y fotos “íntimos” de mujeres como forma de “amenaza” o “chantaje”, así como, el acceso a las redes sociales sin previo consentimiento, sobre todo en parejas jóvenes.
No obstante, Ferreyra incidió en que además de penalizar los diferentes tipos de acoso, es necesario que la ley aplique políticas de prevención y concienciación para conseguir desnaturalizar tanto el acoso callejero, como el virtual, así como bajar el nivel de inseguridad.
De este modo, la representante destacó la importancia de incluir en la ley de Educación Sexual Integral, herramienta que consideró “muy valiosa” para concienciar y visibilizar, un capítulo relacionado con las nuevas tecnologías.
“Hay que hacer un diseño de los espacios públicos con un enfoque de género. Nosotros necesitamos pensar nuevas ciudades, ciudades seguras”, declaró la coordinadora.
Entre los aspectos que no contribuyen a proporcionar mayor seguridad a las mujeres, mencionó la falta de iluminación de calles y paradas de transporte público durante la noche.
La organización ya presentó un proyecto ley en 2016 que incluía incorporar la penalización del acoso sexual callejero como método de erradicación de la violencia machista.
Con los resultados de las próximas encuestas, Mumalá espera poder presentar una propuesta “integral” que contribuya a la definición de políticas públicas que prevengan, conciencien y penalicen dicha situación.
Según las estadísticas que observatorio registra, el hogar familiar es el lugar más inseguro para las mujeres.
Desde el inicio del año hasta el 31 de marzo se contabilizan 72 feminicidios en Argentina.