A lo largo de esta legislatura, Pedro Sánchez ha sido objeto de una multitud de motes, bautizado por la derecha mediática con nombres como Falconetti, Perro Sanxe, Cum Fraude, Antonio, Sánchezstein, El matón de la Moncloa, entre otros.
Sin embargo, en las últimas semanas, algo ha cambiado en la percepción de estos apodos, y algunas personas han comenzado a llamar cariñosamente a Sánchez “Perro Sanxe”, generando así una serie de memes en su honor.
El político Ramón Espinar compartió una curiosa anécdota en Twitter, revelando que en un grupo de WhatsApp compuesto por personas de diferentes ideologías, todos se refieren al presidente del Gobierno como “el perro” de manera unánime.
“Llevamos un rato hablando en un grupo de whatsapp de las elecciones. Me sorprende la naturalidad con la que, gentes de pensares y procedencias diferentes, nos referimos al Presidente del Gobierno como “El Perro” de forma unánime”, expresó Espinar en Twitter.
Llevamos un rato hablando en un grupo de whatsapp de las elecciones.
Me sorprende la naturalidad con la que, gentes de pensares y procedencias diferentes, nos referimos al Presidente del Gobierno como "El Perro" de forma unánime.
— Ramón Espinar (@RamonEspinar) July 20, 2023
Ante la pregunta de si lo hacen “desde el cariño”, el exsenador de Podemos respondió con un ingenioso “El Perro Sanxe”.
Este cambio en la percepción de los motes hacia Pedro Sánchez refleja cómo los apodos pueden evolucionar y tomar significados diferentes según el contexto y la intención de quienes los utilizan. Lo que en un principio podría haber sido empleado como una forma despectiva, ahora parece ser utilizado en tono cariñoso y humorístico.
Llevamos un rato hablando en un grupo de whatsapp de las elecciones.
Me sorprende la naturalidad con la que, gentes de pensares y procedencias diferentes, nos referimos al Presidente del Gobierno como "El Perro" de forma unánime.
— Ramón Espinar (@RamonEspinar) July 20, 2023
En busca de fortuna y de placeres
Mas siempre atrás nos ladran,
Ladran con fuerza…
Quisieran los perros del potrero
Por siempre acompañarnos
Pero sus estridentes ladridos
Sólo son señal de que cabalgamos