Ángel Bernardo Tahoces no debe seguir en su puesto ni un minuto más al haber permitido supuestamente una situación del todo insostenible en la explotación minera de San Finx.

Los indicios que hay sobre el caso y que relata la Fiscalía de Medio Ambiente, en el que la Dirección Xeral de Minas con el investigado al frente aprobó la reapertura del proyecto extractivo, se suprimió la necesidad de Estudio de Impacto Ambiental como condicionante, y supuestamente existió permisividad con la contaminación minera son razones más que suficientes para que Ángel Bernardo Tahoces sea cesado al frente del cargo público que ocupa.
Hay que recordar, además, que el todavía Director Xeral de Enerxía e Minas, en este y otros proyectos como los eólicos de Mouriños (Cabana de Bergantiños) y Pena Forcada-Catasol II (Laxe), que Naturgy está instalando en dos de los últimos paisajes vírgenes de la Costa da Morte, no ha dudado en utilizar el mazo de la Ley 5/2017, impuesta por el PP a golpe de mayoría absoluta, para acelerar su tramitación ignorando por sistema el centenar de alegaciones presentadas por colectivos y particulares, convirtiendo a marchas forzadas algunos de los puntos más valiosos del entorno natural gallego en suelo industrial.
De hecho, la citada Ley 5/2017, de fomento de implantación de iniciativas empresariales en Galicia, impuesta por el PP a golpe de mayoría absoluta y defendida tanto por los responsables políticos tanto de la Dirección Xeral de Enerxía e Minas como por la Consellería de Industria simplifica y acelera al máximo los procedimientos administrativos en perjuicio de los intereses de las poblaciones afectadas, pues en la práctica el proceso de información pública pasa a ser algo meramente testimonial.
Por otra parte, y en aras de la objetividad, a la ciudadanía de a pie le resulta difícil comprender cómo puede ser posible, tal y como se ha publicado recientemente en prensa económica, que el propio Tahoces pueda formar parte del consejo de administración de Gas Galicia, empresa participada por Naturgy en sus dos terceras partes, y que también ejerza de secretario en el centro tecnológico Energylab, cuyo presidente de su comité ejecutivo es el delegado de la energética en territorio gallego.