Cynthia Duque Ordoñez
Gramsci decía que en los claroscuros entre eras nacían los monstruos. Llevaba razón.
Hace siete años unos grupos rebeldes encabezaron un golpe de Estado que no tumbó al gobierno de Bashar al Assad, como sí hicieron sus análogos con Gaddafi.
Casualidades inexplicables acontecidas durante uno de los momentos de mayor tranquilidad en Oriente Medio que provocaron nuevas “primaveras“ o revoluciones de colores en los principales Estados no alienados y sustancialmente más modernos, tolerantes y ricos. Por motivos que no llegamos a comprender la vanguardia revolucionaria implanta la Sharia allí donde se impone por la fuerza con el apoyo de los gobiernos de Francia, Israel, EE.UU, Turquía, Arabia Saudí entre otros pertenecientes a la OTAN. A estos grupos los hemos llamado de diferentes maneras: Daesh, al Nusra, FSA, Jaysh al Islam o los propios White Helmets.
Para quienes no conozcan a estos últimos Netflix, la empresa dedicada al cine y series de George Soros, impulsor de las revoluciones de colores en Europa, rodó un documental que tuvo bastante éxito en los Óscar. Nadie duda de sus capacidades de sobreactuación a la vista de las imágenes y vídeo que a continuación indico.
Confesión de un miembro de los White Helmets «Hacíamos escenificaciones constantemente. Fuente: Al Masdar Español.
Además son innumerables las imágenes en las que vemos a miembros del Daesh y de los White Helmets compartiendo plano en aparente armonía mientras que en otras podemos comparar que la misma persona se pone un mono blanco o negro según convenga mejor de cara a la opinión pública.
La organización White Helmet se caracteriza por la difusión de materiales falsos y su estrecha vinculación con los terroristas. De modo que no se puede confirmar la veracidad de sus vídeos, ya que en el pasado se ha demostrado la falsedad de sus vídeos.

Una vez contextualizado el conflicto a groso modo, me pregunto ¿está internacionalizado el conflicto?
A diferencia de la guerra en Libia, en la que participó activamente la OTAN, en Siria no ha habido intervención occidental ´´oficialmente´´ autorizada, dejando a un lado que en la toma de Alepo se encontraron escondidos a decenas de altos cargos de la OTAN que por casualidad estaban en una ciudad tomada por terroristas hacia más de 5 años. Pero dejando a un lado a este suceso ¿aislado? no ha habido apoyo oficial a una invasión gracias el veto de Rusia y China en el Consejo de Europa. Lo cual tiene una inmensa importancia, porque solo estarán autorizados para tocar o sobrevolar espacio sirio aquellos que cuenten con la autorización del gobierno de Damasco, es decir, solo los ejércitos de Rusia, Irán y el Líbano.
Hoy un enclave geoestratégico de importancia que desde los años 90 venía siendo imparcial se posiciona y no con el bloque occidental o ¿las potencias del Eje?
Desde el primer momento se ha tratado de criminalizar el gobierno sirio cuando las imágenes de al Assad con su pueblo nos demuestran lo contrario y se ha tratado de demonizar al gobierno con los mismos argumentos que en 2003 nos llevaron a invadir Irak bajo falsos argumentos como la tenencia de armas de destrucción masiva o de utilización de armas químicas contra su pueblo.
Gramsci decía que en los claroscuros entre eras nacían los monstruos. Llevaba razón.
¿Qué hay de verdad en el supuesto ataque con armas químicas?
El día siete de abril los White Helmet denuncian un nuevo ataque con armas químicas sobre la población civil de Duma (Ghouta Oriental) que dejaba 70 fallecidos. Sin embargo, en las mismas imágenes se atendía a los heridos solo con agua a modo cura para todo y sin ningún tipo de protección en forma de guantes o mascarillas, algo extraño atendiendo a la toxicidad que debería haber en el ambiente y sobre los cuerpos de los heridos o su delicado estado. Además dichos cuerpos carecían de las heridas de quemadura o de inflamación de las vías respiratorias habituales en los ataques con armas químicas de EE.UU contra la población civil de Vietnam o de Israel que en 2014 cercó Gaza y la roció de un producto químico altamente cancerígeno y prohibido.
Los militares de Estados Unidos vertieron 20 millones de galones de Agente Naranja en Vietnam desde 1962-1971. La población civil tuvo secuelas fisicas como quemaduras visible en todo su cuerpo.
Jaysh al Islam y los White Helmets culpan al ejército sirio, mientras que el gobierno sirio acusa a los islamistas. La acusación de las bandas terroristas es sostenida por EE.UU y la amplia a Rusia por apoyar al gobierno de Damasco.
Sucede cuando la ciudad está prácticamente rendida desde hace días y se trata de acordar un cordón humanitario para evacuar a los civiles que quedan en esa área que hasta el momento los “rebeldes” han utilizado como escudos humanos al impedir su desalojo compeliéndolos a vivir el fuego cruzado. Las milicias que se guarecían eran principalmente Jaysh al Islam y Ahrar al Sham, HTS y Fuerzas del fallecido Ahmed al Abdo, milicia muy protegida y entrenada por EE.UU en su base militar ilegítima en al Tanf.
Como se puede comprobar por la imagen Ghouta es un enclave importante para EE.UU, un puesto de mando en el corazón de Damasco.
¿Qué mejor que un ataque de falsa bandera como el que daba la vuelta al mundo el año pasado en Alepo para evitar perder una buena posición en una guerra en la que tus peones están perdiendo?
¿Para qué atacar por el aire una ciudad que tienes ganada por tierra?
Las milicias de Jaysh al Islam han llegado a un acuerdo con las SAA – Syrian Arab Army o Ejército Árabe Sirio- para abandonar la ciudad en 100 autobuses, pero la duda está sembrada. Veremos si se ha conseguido abrir la puerta a que la ONU autorice una intervención en la próxima sesión recientemente convocada, con el mismo falso argumento que se autorizó en Libia o Irak. Intervención inmediata que solicita el rabino principal de Israel Yitzak Yosef.
Hace unos días EE.UU decidía abandonar Siria, hoy sabemos que era un farol.

¿Qué se busca con un ataque de falsa bandera?
Conseguir legitimidad para en defensa de los derechos humanos invadir y ocupar legalmente aquellos territorios controlados por las FSA en los que EE.UU ha levantado 10 bases militares y expoliar Siria, como impunemente hacía EE.UU e Israel con la ayuda de los ¨rebeldes¨ en aquellos territorios que estos últimos ocupaban. No me refiero solamente y que no es poco a la extracción y venta ilegal de crudo, sino al expolio de patrimonio histórico y artístico perteneciente a toda la humanidad con el objetivo de venderlo en el marcado negro de arte.
Sin pruebas fehacientes de la utilización de armas químicas contra el pueblo libio esté fue invadido y hoy, el antaño vigoroso Estado dirigido por el León de África, se encuentra dividido en tres autonomías que se disputan el poder central mientras la esclavitud de los inmigrantes sudafricanos se extiende como la pólvora al tiempo que se construye la más importante ruta del hachís hacia Europa.
¿Quién ha orquestado la trama?
¿Quiénes son los principales beneficiados de una fragmentación y destrucción del Estado sirio?
En respuesta al atentado de falsa bandera las Fuerzas Aéreas de Israel bombardean la base T4 próxima a Palmira, cobrándose 14 vidas humanas. Vengándose así del derribo de su F16 hace unos meses cuando invadía espacio aéreo sirio.
PD: el 13 de mayo de 2016 Amnistía Internacional denunciaba el ataque con armas químicas en un barrio de mayoría kurda de Alepo. Fue obra de Fatah Halab, coalición a la que pertenecía Jaysh al Islam.
No todo está perdido, hay luces que brillan entre las sombras retratando a los monstruos nutridos de miedo y terror.
Mierda de artículo escrito por una comunista que estudia derecho y administración de empresas. Que se dice analista político y repite como un loro las consignas del partido y que tiene el corazón en oriente medio pero la lengua en el culo de al-assad.
Al-assad es un criminal que dispara, tortura y gasea a su pueblo.
Y la “comentarista” es cómplice
A ver si está ignorante que quiere ser escritora se entera de que va la cosa.
Ahora empieza a dar a conocer el nombre y el apellido de algunas personas:
Listas de muertes en las cárceles.
“Bashar Asad publica los nombres de cientos de presos muertos en sus cárceles desde que estalló la guerra
Hasta 13.000 personas pueden haber sido ejecutadas en secreto en la prisión Sednaya, que Amnistía tacha de “matadero humano”
Saydnaya, la atroz cárcel siria donde mueres o ganas la libertad
En total hasta ahora, se supone según el observatorio sirio que la guerra civil ha producido 400 000 muertos en general y 2700 desaparecidos
Claro, y según “Laloca” (apelativo que parece venirle como anillo al dedo), la solución a todo esto es que actúe la “comunidad internacional”: es decir, eufemismo utilizado para pedir que EEUU y otros aliados del imperialismo inicien una lluvia de fuego sobre el país en cuestión, como hicieron con Libia o Irak, y con tantas naciones y pueblos durante décadas. Eso sí, mientras tanto, el “pacifismo de mercado” no se mancha las manos y puede seguir viviendo su ilusión de que son antimilitaristas, igual que los “fake” de cascos blancos o el “observatorio sirio de derechos humanos” (una sóla persona transmitiendo desde Londres). Qué poca vergüenza tienen lxs “pacifistas de mercado”, que tienen mucho de mercado y bien poco de pacifistas……..la Albert Einstein Institution de Gene Sharp, la fundación Open Society de Soros y Avaaz les estarán eternamente agradecidos, igual que la CIA