La Policía belga cortó hoy dos calles del barrio europeo de Bruselas cercanas a la sede de la Comisión Europea (CE) por un aviso de bomba que resultó ser una falsa alarma.

“Una firma de consultoría de la Comisión Europea ha recibido un aviso sobre que iba a explotar una bomba”, declaró a Efe una portavoz de la Policía, quien agregó que tras dos horas de intervención los agentes están desmantelando el dispositivo.

Las fuerzas de seguridad impidieron el paso en la calle Rue Breydel, donde hay oficinas privadas y también de las instituciones comunitarias, y un tramo de unos 100 metros de la perpendicular avenida Augerghem, donde se encuentra la oficina de la representación británica ante la Unión Europea (UE).

Unos treinta agentes, entre efectivos de la policía municipal y federal, artificieros, bomberos y personal médico se desplazaron hasta el lugar de la alerta, donde establecieron un perímetro de seguridad.

Los agentes llevaron consigo un perro entrenado para detectar explosivos que no encontró nada sospechoso, por lo que la Policía decidió desmantelar “tranquilamente” el dispositivo desplegado junto a la colindante rotonda de Schuman.

Fuentes comunitarias confirmaron a Efe el aviso de bomba y señalaron que los edificios del Ejecutivo comunitario no se han visto afectados.

Las fuerzas de seguridad belgas han abierto una investigación para determinar el origen de la llamada que obligó a cerrar esa zona situada en pleno corazón del barrio europeo de Bruselas, a unos 100 metros de los edificios del Consejo de la UE donde este jueves y viernes los líderes de la Unión Europea celebrarán una cumbre centrada en el “brexit”.

DEJA UNA RESPUESTA