El sistema d’Hondt, que es el método utilizado para la asignación de escaños en proporción al voto, ha penalizado en esta ocasión la división en la izquierda. La ley d’Hondt es una compleja fórmula matemática que reparte los escaños dentro de una circunscripción de manera proporcional.
Este sistema es sólo una parte del sistema electoral español. Otros factores importantes son el umbral de voto (el porcentaje mínimo de voto para conseguir escaños), el prorrateo (si se reparten los escaños de igual forma en todas las circunscripciones o de forma proporcional), la forma de voto (listas abiertas, cerradas o mixtas) y la circunscripción.
Este último factor es el que según los expertos es el principal causante de la desproporcionalidad en España. Los más favorecidos por este sistema son los grandes partidos y aquellos que acumulan un gran número de votantes en el mismo espacio geográfico.
Unidas Podemos y Más País se han visto perjudicados en esta ocasión por este sistema, que ha sumado, en conjunto, 34.500 votos más que Vox en estos comicios. Sin embargo, entre ambas candidaturas han obtenido 14 diputados menos que la formación de extrema derecha, que ha irrumpido como tercera fuerza parlamentaria.
El partido de extrema derecha de Abascal ha obtenido el respaldo de 3,63 millones de electores. Este resultado le servirá para tener 52 escaños en el Congreso en la próxima legislatura.
Unidas Podemos y sus confluencias se han hecho con 3,09 millones de votos que se traducirán en 35 asientos en el Congreso. Más País, la formación con la que Iñigo Errejón ha dado el salto a la política nacional, se ha quedado en sólo tres escaños y 576.000 votos. Entre ambas candidaturas suman, por tanto, 3,67 millones de votos y 38 diputados.