El pasado martes 24 de mayo, 19 niños y dos profesoras fallecieron en un tiroteo en una escuela de primaria de la localidad de Uvalde (Texas, EE.UU.). Este tiroteo es uno de los ataques en centros educativos de Estados Unidos más mortíferos de los últimos años.
Este martes, el periódico The Austin American-Statesman publicó partes de un polémico vídeo de las cámaras de vigilancia de la escuela en las que se puede ver a los oficiales de la policía esperando en el pasillo de la Escuela Primaria Robb para irrumpir en el aula donde estaba ocurriendo el fatal tiroteo y detener al asesino.
En los vídeos, que resumen una secuencia de 77 minutos, muestran a Salvador Ramos, de 18 años, entrando tranquilamente y portando un rifle semiautomático en la escuela. Frente a la puerta de un aula comienzan los disparos. Justo en ese instante se ve como se acerca por el pasillo un niño que al escuchar los disparos sale corriendo.

A continuación se ve a varios policías armados con pistolas llegando al pasillo de la escuela en cuestión de minutos que salen corriendo en medio del sonido de los disparos. Después puede verse a los oficiales locales, estatales y federales, fuertemente armados y usando chalecos antibalas, cascos y en algunos casos escudos retirarse corriendo ante los primeros disparos que parecen dirigidos en su contra y caminando hacia adelante y hacia atrás por el pasillo.
Los agentes tardan en intervenir una hora y 14 minutos desde la llegada de Salvador a la escuela
Una hora y 14 minutos después de la llegada del joven armado a la escuela los agentes intervienen para detener la masacre y abaten a Salvador. Para entonces el tirador había matado a 19 niños y a dos maestras, y herido a otras 17 personas.
Ramos sufrió bullying en el mismo centro en el que llevó a cabo la matanza. Sus compañeros se reían de él por su ropa y por las carencias económicas de su familia.
Las grabaciones dejan clara la lenta respuesta de la policía, lo que ha provocado la indignación de los vecinos de la localidad, quienes han pedido responsabilidades y explicaciones sobre la operación policial, que hasta hora han sido incompletas, y en ocasiones inexactas, en las siete semanas posteriores al tiroteo.
El comité legislativo de Texas que investiga el tiroteo tiene planeado enseñar el próximo domingo la grabación completa, de más de una hora, a los familiares de las víctimas y posteriormente al público en general.