La líder de Sumar, Yolanda Díaz, ha acudido al programa «Lo de Évole» para hablar sobre la situación actual de su formación política y su relación con Podemos de cara a las próximas elecciones generales.
Díaz ha culpado a Podemos de no querer llegar a un acuerdo y de poner la celebración de primarias como excusa para no unirse a la plataforma Sumar. La candidata ha dejado claro que dos personas llegan a un acuerdo cuando quieren hacerlo y ha recriminado a Podemos que pidan la unidad «a torta limpia».
La líder de Sumar ha revelado que los equipos de Sumar y Podemos celebraron una única reunión para conocer las propuestas de ambas formaciones, acercar posturas e intentar sumarlos a la plataforma. Sin embargo, Podemos se levantó de la mesa y no volvieron a ella. Yolanda Díaz ha insistido en que los dos partidos llegarán a un entendimiento, pero «las cosas serias no se discuten así».

En cuanto a la celebración de primarias, la líder de Sumar ha vuelto a insistir en que su formación hará unas abiertas a la ciudadanía, permitiendo a quien quiera presentarse hacerlo, mientras que Podemos ha puesto la celebración de primarias como una excusa para no unirse a la plataforma Sumar.
La entrevista también ha tenido otro protagonista, el que fuera secretario general de Podemos, Pablo Iglesias. Díaz ha asegurado que no tiene ninguna pelea con él y ha señalado ha aguantado lo que nadie en democracia tanto por los escraches realizados en su vivienda como por todas las falsedades que se han vertido contra él y su pareja, Irene Montero.
Además, ha hablado sobre el tuit que publicó criticando a los que «se ponen de perfil» cuando se estaba atacando a su pareja, Irene Montero. Díaz ha confesado que en su momento ya le dijo a Iglesias «que está hecho un cascarrabias, está enfadado todo el tiempo… creo que no se hace política en negativo».
En otro punto de la entrevista, al preguntarle por actitudes machistas del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, Yolanda Díaz ha asegurado que hay «machismo por todos los sitios» y que la forma de hacer política del jefe del Ejecutivo es «masculina».
La vicepresidenta segunda del Gobierno ha dejado claro que admira y respeta a Sánchez como «un gran político» al que han minusvalorado, incluso en su propio partido.